La española y el mexicano piden una "forma segura" para salir de El Aaiún

Actualizado: domingo, 14 noviembre 2010 20:50

MADRID, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los activistas prosaharauis Isabel Terraza y Antonio Velázquez continúan por el momento en El Aaiún a la espera de que la diplomacia española les ofrezca una "forma segura", según ha explicado una portavoz del grupo al que pertenecen, Resistencia Saharaui.

"Antonio e Isabel están corriendo un riesgo porque están buscados, amenazados y han entrado en casas de familias saharauis que ellos conocen buscándolos con ametralladoras", ha explicado la portavoz en declaraciones a Europa Press. "Piden una forma segura y responsable, un acompañamiento", dijo.

Los otros dos activistas prosaharauis que estaban en El Aaiún, Javier Sopeña y Silvia García, han sido evacuados este domingo de la ciudad con protección consular de la diplomacia española, pero Isabel, también española, y Antonio, ciudadano mexicano, no han podido acogerse a esta protección y continúan ocultos.

"No han rechazado en ningún momento la salida", ha señalado la portavoz de Resistencia Saharaui, que ha confirmado que la diplomacia española no se puso en contacto con ellos hasta después de que desmintieran las declaraciones de la Ministra de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Trinidad Jiménez, quien el pasado viernes aseguró que tenían localizados a los españoles y que se habían comunicado con ellos.

"Hasta el viernes no se había puesto nadie en contacto con Antonio e Isabel, aunque tenían su teléfono", ha señalado la portavoz del grupo prosaharaui. "Después del desmentido Isabel recibió la llamada de la ministra personalmente y es entonces cuando se empieza a plantear cómo salir", ha relatado. Sin embargo, el procedimiento no fue concretado en esa conversación.

Este mismo sábado el Ministerio del Interior de Marruecos solicitó a los cuatro activistas que se presentaran ante las autoridades del país para ser expulsados. Sin embargo, no se ha emitido ninguna orden de búsqueda ni se desarrollará contra ellos una persecución judicial, ya que no han infringido ninguna ley, explica el Ministerio en un comunicado recogido por la agencia de noticias oficial marroquí, MAP.

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