MADRID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
El fiscal del Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY), Serge Brammertz, ha indicado este sábado que Srebrenica "es un recordatorio permanente del inmenso sufrimiento que los seres humanos se pueden infligir los unos a los otros".
Durante los actos por el 20º aniversario de la matanza, Brammertz ha dicho que "el genocidio en Srebrenica fue el resultado de un plan deliberado diseñado al más alto nivel". "Un grupo de hombres abusaron de su poder y autoridad para destruir la comunidad bosnia musulmana del este de Bosnia", ha agregado.
"Para respetar el pasado, a las víctimas y a los supervivientes, debemos llamar a Srebrenica por su nombre: genocidio. Para construir el futuro debemos hablar con una voz cuando esto se niega", ha argumentado.
Asimismo, ha dicho que las víctimas han jugado un papel en los procesos abiertos contra los presuntos responsables del genocidio. "Sin las víctimas la justicia no habría sido posible. Vuestro valor y determinación son un ejemplo para todos", ha añadido.
Brammertz ha reclamado a la comunidad internacional "que siga apoyando el proceso de rendición de cuentas", al tiempo que ha subrayado la necesidad de "continuar buscando a las personas desaparecidas".
Por último, el fiscal del TPIY ha hecho un llamamiento a la reconciliación, explicando que "aceptar la verdad es el primer paso para ello". "Cuando hay ignorancia se debe responder con educación, y cuando hay negación debemos responder con afirmación", ha remachado.
La oficina del fiscal ha imputado a un total de 20 personas por los crímenes en Srebrenica, catorce de los cuales han sido condenados. Por otra parte, los procesos contra cuatro están en marcha, mientras que el juicio de Radovan Karadzic terminará en diciembre y el de Ratko Mladic en noviembre de 2017.
AGRESIÓN A VUCIC
Las conmemoraciones del aniversario del genocidio se han visto marcadas por la agresión sufrida durante la jornada por el primer ministro de Serbia, Aleksandar Vucic, quien ha sido objeto del lanzamiento de piedras y otros objetos por parte de manifestantes enfurecidos, que le han obligado a escapar del lugar protegido por sus guardaespaldas.
El propio Vucic ha reiterado horas después del incidente que "tiende la mano" a los bosniacos pese a la agresión durante el acto en recuerdo del 20º aniversario de la matanza de Srebrenica, perpetrado por serbobosnios, si bien ha asegurado que no se ha tratado de un "incidente", sino de "un ataque bien organizado".
"A pesar de haber visto el tipo de odio que no había visto jamás, mi mano sigue tendida para los bosniacos", ha afirmado Vucic en referencia a las pedradas lanzadas contra él, según recoge la emisora de radio serbia B-92.
Vucic ha denunciado que la verja que rodeaba el recinto estaba rota y que alguien debía saberlo. En cuanto a las consecuencias del ataque, ha asegurado que los coches de la comitiva, excepto el blindado, han resultado dañados y que él mismo tiene un labio roto y las gafas rotas. "Lamento que haya ocurrido algo así. Hay quienes no reconocen que trabajo por la reconciliación", ha argumentado en rueda de prensa desde Belgrado.
"Hay idiotas en todos los países. Aquí no es diferente", ha destacado, aunque ha indicado que sabe "que la mayoría de los bosniacos no están de acuerdo con lo que ha ocurrido hoy". "Mi mensaje para todos los serbios es que caminen con orgullo y que nunca ni en ninguna parte den muestras de odio contra sus vecinos bosniacos", ha remachado.
El incidente comenzó cuando la comitiva de Vucic, que viajaba acompañado por un equipo de guardaespaldas, se encontró con un grupo de varias decenas de personas que interrumpían la ruta.
Los manifestantes en un primer momento increparon al primer ministro serbio, pero la situación escaló hasta que empezó el lanzamiento de objetos, entre ellos piedras y botellas de agua. Vucic se vio obligado a entrar de nuevo en su vehículo oficial protegido por paraguas abiertos.
