La Comunidad de Madrid ultima los trabajos de restauración de la iglesia de las Carboneras

El consejero Jaime de los Santos durante su visita
COMUNIDAD DE MADRID
Actualizado: sábado, 25 noviembre 2017 12:35

MADRID, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Comunidad de Madrid está a punto de concluir los trabajos de restauración de la iglesia del monasterio de las Jerónimas del Corpus Christi, conocida como iglesia de las Carboneras, en la madrileña plaza del Conde de Miranda.

Según ha informado el Ejecutivo regional, se trata de un conjunto de estilo barroco que data de principios del siglo XVII y que fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 1981.

Para la restauración de este convento, el Gobierno autonómico ha invertido algo más de 483.000 euros desde 2007, correspondiendo la última fase de la restauración a la mejora de las campanas de la iglesia y del retablo de Santa Paula.

El consejero de Cultura, Turismo y Deportes de la Comunidad de Madrid, Jaime de los Santos, ha visitado hoy la iglesia y ha destacado la calidad artística de los trabajos. Además, De los Santos ha querido subrayar el "compromiso del Gobierno con la conservación y puesta en valor del Patrimonio histórico regional, un legado cultural que tenemos la obligación de proteger y recuperar".

Para lograr este objetivo, como ha explicado el consejero, desde 2015 el Gobierno regional ha invertido un total de 13,4 millones de euros en 165 actuaciones de restauración y conservación, de las cuales 105 corresponden a bienes inmuebles (puentes, fuentes, etc.) y otras 60 a bienes muebles (retablos, escultural, lienzos, órganos, etc.).

Además, la Comunidad de Madrid, a través de la Dirección General Patrimonio Cultural, ha declarado desde el inicio de la legislatura 17 BIC (Bien de Interés Cultural) y 26 BIP (Bien de Interés Patrimonial), entre los que destacan el Teatro Albéniz, el Palacio de la Prensa y la estatua ecuestre de Felipe III, en Madrid.

El monasterio de las Jerónimas del Corpus Christi, Carboneras, fue fundado en 1607 por Beatriz Ramírez de Mendoza y diseñado y construido por el maestro Miguel de Soria.

En la actualidad se conserva prácticamente como era en el siglo XVII, por lo que constituye un claro ejemplo de arquitectura conventual y del barroco madrileño del primer tercio de siglo, recalca el Ejecutivo autonómico.

En cuanto a la iglesia, de una sola nave con tres tramos de hornacinas sin crucero, está cubierta con una bóveda de cañón con lunetos y tiene la capilla mayor elevada sobre el nivel general. Se trata del único ejemplo de esta tipología que se conserva en Madrid y alberga, además, interesantes obras de arte.

RESTAURACIÓN DE LAS CAMPANAS Y EL RETABLO DE SANTA PAULA

En el último año, la Dirección General de Patrimonio ha restaurado dos campanas de volteo ubicadas en el campanario. Se trata de dos timbres de bronce fundidos por la misma familia, el más pequeño de ellos data de 1898 y es obra de Constancio Linares; mientras que el mayor es de 1907, por los hijos de Eduardo Linares.

La intervención se ha centrado en la limpieza y restauración de ambas campanas a nivel acústico, incluyendo la soldadura de roturas. Con esta acción, además de devolver ambos elementos a su estado original, se han recuperado los toques antiguos que habían desaparecido y ahora volverán a sonar, tanto de forma manual como automática.

Por otro lado, la iglesia de las Carboneras alberga en su interior un importante conjunto de retablos barrocos. Entre ellos, destacan los tres de cabecera: el central dedicado a la institución de la Eucaristía, y los laterales a San Jerónimo (que ya restauró el Gobierno regional en 2016) y Santa Paula.

Los trabajos en madera están atribuidos al entallador granadino Antón de Morales, mientras que los lienzos serían obra de Vicente Carducho y otros pintores de su círculo artístico.

En la actualidad, la Dirección General de Patrimonio está ultimando los trabajos de recuperación del retablo de Santa Paula, realizado en madera cromada.

La obra consta de una sola calle y un banco de tres cajas para pintura, flanqueado por ménsulas con decoración de acanto. Este retablo se encontraba en mal estado de conservación, en especial por la suciedad y repinte, que impedían apreciar la obra.

Con esta intervención de limpieza y sellado de grietas, entre otras acciones, se devolverá al retablo su aspecto original para que pueda ser admirado por todos los madrileños.