Parte de San Bernardo 68 se erigirá como centro sociocultural destinado a la ciudadanía

Publicado: martes, 19 junio 2018 17:42

Las instalaciones se compartirán con Bomberos y Samur-Protección Civil

MADRID, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -

El edificio ubicado en el número 68 de la calle San Bernardo se erigirá como una nueva alternativa cultural para los vecinos del barrio de Malasaña gracias proyecto del 'Centro Sociocultural de San Bernardo, 68' cuyas oficinas serán destinadas a dotaciones culturales y vecinales.

El proyecto, que se presentará esta tarde de mano del concejal-presidente del distrito, Jorge García Castaño, fue propuesto por la ciudadanía en los Presupuestos Participativos del año 2017. Las instalaciones se compartirán con Bomberos y Samur-Protección Civil.

La nueva instalación cultural, que tendrá 2.055,43 metros cuadrados, está ubicada en la calle San Bernardo, 68, esquina con la calle Palma y, próxima a las zonas comerciales de Fuencarral y Gran Vía y de la mítica Plaza del 2 de mayo.

Las obras del proyecto se llevarán a cabo por la Dirección General de Patrimonio, dependiente del Área de Economía y Hacienda, con un importe de 2.133.654 euros.

El edificio, que ha sido construido recientemente y cuenta con seis plantas, es una nueva dotación para el barrio. Compartiendo las instalaciones se encuentra el Parque de Bomberos, 6 y una base de Samur-Protección Civil; el resto, tres plantas y una bajo cubierta se dedicarán al centro sociocultural atendiendo a las necesidades de los vecinos.

El nuevo Centro Sociocultural de Malasaña será una nueva dotación para el barrio de Universidad, el segundo más poblado del distrito, buscando satisfacer las necesidades de la zona y, se une a la ya existente del Centro Cultural Clara del Rey (calle Palma, 36).

San Bernardo, 68, aparece asociado en el siglo XIX a la Universidad Central y, como bloque de viviendas "de cierta categoría o edificio comercial". En 1901 albergaba un almacén de papel de la propia universidad; pero cuando más importancia cobró fue con la Academia Pensión Cervantes, que se anunciaba en prensa.

Ya en 1912, San Bernardo, 68 cambió de uso a Centro Instructivo de Ciegos, una institución benéfica, donde Carolina Mahou impulsó una biblioteca de braille. En la Segunda República, concretamente en 1931, se convirtió en Casa de la República, albergando publicaciones periódicas y reuniones de intelectuales y artistas.

En su última época, fue un hospital privado. En el año 2003, el edificio afectado por aluminosis fue derribado tras ser adquirido por el Ayuntamiento de Madrid a través de una permuta. Así, el Consistorio ha podido desarrollar este nuevo Centro Sociocultural San Bernardo.

DOTACIONES

En la planta tercera habrá un salón de actos para unas 245 personas en un espacio de 304 metros cuadrados, contando con camerinos en el caso de que se lleven a cabo representaciones artísticas. También se proponen actividades de modelación física, con 120 metros cuadrados en dos aulas, apropiados para gimnasia de mantenimiento, baile, taichí o pilates, entre otros.

Una planta más arriba, en la cuarta, se podrán realizar actividades plásticas, como cerámica, pintura y restauración/tapicería, contando para ello con 200 metros cuadrados, que se pueden dividir en cuatro o más aulas. También en esta planta se podrán realizar actividades de manualidades y encuadernación y, contará con una ubicación de 100 metros cuadrados como sala de exposiciones.

Las actividades teóricas tendrán cabida en la planta 5ª, como Conocer Madrid, idiomas o música. Por otro lado, contará con un espacio cultural digital de 120 metros cuadrados, para talleres de aplicación de la tecnología mediante proyectos que combinen arte, tecnología, ciencia y activismo social.

La sexta planta albergará despachos y la dirección del centro. Contará además con salas de lectura y estudio y, un taller de radio.

Además, el nuevo Centro Sociocultural San Bernardo está dotado de instalaciones adaptadas para que cualquier discapacitado pueda acceder al interior del edificio sin ningún impedimento y poder disfrutar de las instalaciones.