MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Municipal del PP en el Ayuntamiento de Madrid presentará en el próximo Pleno de Cibeles una moción de urgencia condenando los sucesos que se están produciendo en Nicaragua "para tener ocasión de saber si (la alcaldesa) Manuela Carmena está del lado de Rommy Arce o de los derechos humanos".
Así se ha expresado Almeida tras conocerse que ayer se celebró en el centro cultural de Arganzuela, distrito presidido por Rommy Arce, un acto en favor de la revolución sandinista de Nicaragua.
El encuentro contó con la participación de una treintena de simpatizantes y los embajadores del país anfitrión, Venezuela, Cuba y El Salvador, ha adelantado el diario ABC.
"El Gobierno de Manuela Carmena vuelve a mostrar su lado más extremista cediendo un local municipal, pagado con los impuestos de todos los madrileños, para un acto en defensa del gobierno sandinista", ha cargado el portavoz de los populares en Cibeles.
En este punto, Almeida ha indicado que la "ola de represión en Nicaragua suma ya más de 300 muertos" y critica que el gobierno municipal "haga gala de defender los derechos humanos" y "defienda también a un gobierno que suma ya 300 muertos".
Por su parte, la concejala-presidenta de Arganzuela, Rommy Arce, ha publicado en su perfil de Twitter un comunicado de Anticapitalistas, formación a la que pertenece, sobre el acto ocurrido ayer en el centro cultural de este distrito.
"Desde Anticapitalistas queremos manifestar nuestro rechazo a la represión efectuada por el régimen autoritario de los Ortega-Murillo y solidarizarnos con la militancia de izquierda, de los movimientos, y con la gente trabajadora en general que reclama justicia social y libertad", comienza el comunicado.
Aseguran que "el régimen encabezado por Daniel Ortega no tiene nada que ver ya con la Revolución Sandinista" y añaden que "en los últimos años ha adoptado cada vez más una senda económica neoliberal, pactando con fracciones de la burguesía como la representada por el siniestro Arnoldo Alemán".
También han convertido a las siglas históricas del FSLN en un entramado corrupto, en donde el Estado es un simple instrumento de acumulación de riqueza al servicio de una casta familiar", han reprochado.
Asimismo cargan contra la política del "gobierno de los Ortega-Murillo" sobre las mujeres en materia de derechos, "pactando con los sectores más reaccionarios de la Iglesia Católica, penalizando el aborto".
"No queda ninguna razón para apoyar a un gobierno que no representa en absoluto las aspiraciones socialistas de la Revolución Sandinista", han remachado.
A este respecto han indicado ser "conscientes" de que "la movilización del pueblo nicaragüense no es una movilización pura, sino que es un movimiento en el que conviven ideologías y posiciones sociales contradictorias".
