Nunca ha hablado ni de tribunales populares ni de ajustes de cuentas y entiende la "incomodidad" que puede suscitar "entre quien tenga algo que ocultar"
MADRID, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
El delegado de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Madrid, Carlos Sánchez Mato, tiene claro que no le va a callar nadie si encuentran delitos en la auditoría de la deuda y de las políticas públicas, y ha asegurado que los dará a conocer "al Pleno, a la comisión y al fiscal más próximo".
"Iré (a los tribunales) cuando tenga absolutamente claro con información suministrada por funcionarios que hay que ir a la Fiscalía.
Yo iré pero no estoy seguro de quién estará conmigo", ha lanzado a la bancada popular en la comisión ordinaria del ramo.
Lo hará de la mano del trabajo de la nueva subdirección general de auditoría de la deuda y de las políticas públicas, que realizará su trabajo en colaboración con la Intervención General del Ayuntamiento.
"Cuando tengamos conocimiento no de rumores, sino de detalles, lo sabrá el Pleno, la comisión y el fiscal más próximo. A mí no me va a callar nadie. No me calló el Arzobispado (Sánchez Mato fue portavoz del colectivo Iglesia sin Abusos) y no me va a callar el PP si hubo comisión de un delito", ha desafiado el concejal.
Todo ello después de que el portavoz del PP en el área, José Luis Moreno, haya advertido de las consecuencias que tendría para un cargo público como el delegado tener conocimiento de una ilegalidad y no ponerlo en manos de la justicia.
También ha asegurado el delegado que nunca ha hablado de juicios populares ni de ajustes de cuentas después de que José Luis Moreno haya opinado que la auditoría prevista de los ocho últimos años sólo pretende "criminalizar la gestión del Gobierno anterior" y sustituir la democracia representativa por una "farsa".
EJEMPLOS DE "ACTUACIONES VERGONZOSAS"
Sánchez Mato ha defendido la auditoría para que no vuelvan a producirse "actuaciones vergonzosas" en el seno del Ayuntamiento y no ha dudado en poner ejemplos.
Uno de ellos es el de "los 10 millones de euros que se pagan al año por encima del precio de mercado en edificios arrendados" o las cláusulas suelo abonadas, cuyo rescate se cifra en 402 millones de euros.
Otro ejemplo es el contrato de una empresa por 20.000 euros para decirle al Ayuntamiento a cómo cotizan los tipos de cambio cuando el concejal lo puede ver sólo con mirar su móvil.
"De esto no os interesa hablar (a la bancada popular)", sólo de las supuestas fricciones con la alcaldesa, Manuela Carmena. Con la auditoría se trata de determinar si se hizo un mal uso del dinero público, aunque fuera legal. La subdirección propondrá alternativas para que no se repitan esas prácticas negativas. Entiende el delegado que la auditoría puede "provocar dolor en el Grupo Popular" y dar más control al ciudadano porque "no lo ha habido".
Ha remachado diciendo que comprende la "incomodidad" que puede suscitar "entre quien tenga algo que ocultar".
EL "DESMAYO" Y EL ACUERDO CON FCC
Carlos Sánchez Mato ha lanzado irónicamente que no se ha desmayado en la sala por respeto a la comisión, pero que le han dado ganas después de escuchar al PP afirmar que no apoyarían un recurso extrajudicial con FCC en la Caja Mágica cuando fue precisamente este partido el que dejó sentadas las bases para dicho acuerdo antes de que terminara el mandato anterior.
"¿Cómo que os opondréis? ¡Pero si lo propusisteis vosotros! Es espeluznante", ha declarado el delegado en referencia a las obras de la Caja Mágica, licitadas por 85 millones cuando "ya van por los 205 millones", a los que ahora se suma la reclamación de FCC por 32 millones más. "Por eso hay que evaluar las políticas públicas", ha lanzado.
El delegado, por otro lado, ha defendido que hay que "creerse lo público", a diferencia del PP, que "lo ha externalizado todo".
Por eso las auditorías no las pondrían en manos de Deloitte o KPMG sino de las universidades.
