El año que viene está previsto que se realice la misma prueba piloto en todas las universidades madrileñas
MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de 150 alumnos del grado de Educación Primaria realizará este martes en la Universidad de Alcalá de Henares (UAH) una prueba piloto del examen de acceso a Magisterio, una de las nuevas medidas incluidas por la Comunidad de Madrid en su reforma de los planes de estudio para los futuros maestros y que se implantará en 2017 en todas las universidades de la región.
Según recalca la Consejería de Educación, a partir de entonces los futuros maestros deberán aprobar este examen para poder acceder a los estudios de Educación Primaria en las universidades madrileñas.
La prueba piloto, coordinada por la Consejería que dirige Lucía Figar junto a las facultades, se desarrollará en la Universidad de Alcalá de Henares y no tendrá efectos académicos para los 150 estudiantes del primer curso de Educación Primaria participantes.
Está previsto que el próximo año se realice la misma prueba también con carácter experimental, en la que participarán alumnos de Magisterio de todas las universidades madrileña --públicas y privadas-- que imparten este grado, antes de su entrada en vigor en 2017.
90 PREGUNTAS TIPO TEST
La prueba de acceso con carácter experimental fijada para este este martes, adelantada por el diario 'El País', se estructura en tres bloques --Lengua y Literatura, Matemáticas y Cultura General--, cada uno de ellos compuesto por 30 preguntas.
Los estudiantes tendrán dos horas para cumplimentar el cuestionario con las 90 preguntas en las que habrá cuatro opciones distintas de respuesta con una sola correcta.
En un modelo sobre esta prueba, se recogen preguntas sobre geografía, ortografía, conceptos sobre matemáticas y relacionar hechos históricos y personajes, entre otros aspectos.
La Consejería de Educación y las facultades de Educación analizarán los resultados que arrojen esta prueba piloto para perfilar todos los detalles de cara a la preparación y el contenido definitivo de la prueba de acceso a Magisterio que entrará en vigor para 2017, recalcan desde la Consejería.
Hasta la implantación definitiva y con efectos académicos de la prueba de acceso en 2017, la reforma de los planes de Magisterio acordada el año pasado por la Comunidad de Madrid y las universidades exige a los futuros maestros aprobar selectividad con una nota mínima de 5 en Lengua o superar la PAU con una nota final de 9 sobre 14.
Educación subraya que la prueba de acceso de Magisterio "garantizará los principios de igualdad, mérito y capacidad", pues su "principal objetivo" será valorar los conocimientos y las competencias que se consideran "imprescindibles para tener éxito en la formación del plan de estudios".
Su puesta en marcha fue acordada en un convenio suscrito hace ahora un año por la Comunidad de Madrid y los rectores madrileños, un documento con el que se inició la reforma de los estudios de Magisterio para mejorar la excelencia en la formación de los futuros maestros.
MEJORAR ANTE LOS MALOS RESULTADOS DE LAS OPOSICIONES
El texto aprobado incluye además incentivos económicos a las universidades para proyectos en la mejora de la formación de maestros, impulsar la creación de grados bilingües, la apuesta por dobles titulaciones o la coordinación entre universidades para potenciar Lengua y Matemáticas en sus planes de estudio.
Recuerda la Consejería que el Gobierno regional anunció en septiembre de 2013 una "profunda reforma" de los planes de estudios de Magisterio tras los resultados obtenidos en las oposiciones a maestro realizadas en 2011 y ese mismo año.
En la de 2011 cerca del 90 por ciento de los candidatos no logró aprobar un "sencillo examen" de conocimientos generales de las materias que tendrían que impartir a los alumnos de los colegios públicos de la región. En las oposiciones de 2013 los suspensos fueron el 74 por ciento de los candidatos.
Durante el curso 2013/14 un total de 10.013 estudiantes cursaban el grado de Magisterio en Educación Primaria en el conjunto de las universidades madrileñas. De ellos, 4.766 estaban matriculados en universidades públicas y 5.247 en universidades privadas y centros adscritos.
