Más de 266.000 personas en Navarra emplean esta acreditación
PAMPLONA, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
La emisión de la tarjeta ciudadana en colaboración con las cajas Laboral, Caja Navarra y Caja Rural ha supuesto para el Departamento de Administración Local y para las entidades locales, deportivas y culturales adheridas a este proyecto, un ahorro de 500.000 euros en los últimos tres años.
La consejera de Administración Local, Amelia Salanueva, ha realizado un balance de la actividad de la tarjeta ciudadana, en un acto en el que han participado los representantes de las tres cajas que participan en su difusión: Ricardo Goñi, de Caja Rural; José Miguel Albizu, de Caja Navarra; y Alfonso Uitzi, de Caja Laboral; así como el director general de Administración Local, Pedro Pegenaute Garde, y el director del Servicio de Calidad y Modernización, Jesús Carlos Adín.
Salanueva ha destacado que ya son 65 las entidades de Navarra, - desde ayuntamientos a instalaciones deportivas o bibliotecas-, que utilizan la tarjeta ciudadana como medio de acceso a sus servicios, y que, en este último mes, hay cuatro entidades más que han manifestado su interés en sumarse al proyecto. Asimismo ha indicado que, en la actualidad, más de 266.000 personas en Navarra emplean esta acreditación, "y que continúa extendiéndose".
La titular de Administración Local ha recordado que emitir cada una de estas tarjetas, con las últimas tecnologías en identificación, puede costar algo más de un euro y, sin embargo, gracias al convenio establecido con las cajas, el documento es gratuito para los usuarios a cambio de que éstas puedan insertar publicidad en el mismo.
Así, ayuntamientos, concejos, entidades comarcales o instalaciones deportivas o culturales sólo tienen que incorporar a dicha tarjeta la identificación de cada persona para aquellos servicios en los que es necesaria o que demanda el usuario, y distribuirlas a cada uno de ellos. Como se sabe, de esta iniciativa Caja Navarra ha financiado el 50 por ciento, y Caja Laboral y Caja Rural un 25 por ciento, cada una.
Entre los años 2007 y 2010 se han financiado 355.000 nuevas tarjetas y se han sustituido las antiguas con un sistema de validación a través de chip de contacto de tecnología inalámbrica. Precisamente, esa tecnología hace que a cada tarjeta se le puedan ir incorporando accesos o usos de servicios muy diversos. En este punto, la consejera se ha referido a la posibilidad de recargar vehículos eléctricos, cuyos puntos de recarga han sido presentados esta semana por el consejero de Innovación, Empresa y Empleo, José María Roig, como última incorporación al catálogo de servicios de la tarjeta.
En el transcurso de la reunión, se ha incidido también en el despliegue que ha tenido la tarjeta ciudadana, como medio de acreditación de los ciudadanos beneficiarios de la tarifa social del transporte urbano comarcal de Pamplona. Para Salanueva, un servicio que se puede considerar como el más relevante por el volumen de ciudadanos que disponen de este medio de pago, que supera los 50.000 (familias numerosas, jubilados, parados de larga duración, minusválidos, etc.).
A este servicio hay que añadir la acreditación en los servicios de préstamo de libros, vídeos o CDs en la red de bibliotecas; el alquiler de bicicletas en Pamplona; y el acceso a las instalaciones deportivas municipales y centros cívicos en toda la geografía Navarra.
La tarjeta ciudadana tiene la ventaja de que una persona de cualquier localidad de Navarra que venga a Pamplona, si es poseedora de la misma, puede disfrutar de servicios que en su localidad de origen no suele tener. "Todo ello, -en palabras de la consejera-, permite constatar la buena aceptación que este servicio está teniendo no sólo entre los ciudadanos de la Comunidad Foral, sino también entre sus entidades locales que son los gestores y artífices del éxito del proyecto".
