Crónica Internacional.- Sadam Hussein es ejecutado a primera hora de la mañana

- Una cadena de atentados tras su ahorcamiento deja al menos 70 muertos en Bagdad

BAGDAD/MADRID, 30 Dic. (OTR/PRESS) -

Minutos antes de las 6.00 horas de la mañana, en el primer día de la gran fiesta musulmana del Sacrificio, la trampilla del patíbulo donde el ex dictador de Irak Saddam Hussein aguardaba su muerte por ahorcamiento se abrió hacia el vacío. La televisión iraquí retransmitió imágenes de los momentos previos a su ejecución, en las que se podía ver a un Hussein tranquilo, hablando con sus verdugos de camino a la horca. A lo largo de la jornada, en lo que se interpreta como una primera respuesta de los suníes baazistas, una cadena de atentados acabó con la vida de al menos 70 personas.

Poco después de la ejecución del ex dictador, el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, hizo un llamamiento a los seguidores de Saddam Hussein para que cambien su estrategia política. "Insto a los simpatizantes del antiguo régimen a revisar su postura, ya que la puerta sigue abierta para todos aquellos cuyas manos no estén manchadas con sangre inocente, para que ayuden a reconstruir un Irak para todos los iraquíes", anunció en un comunicado.

La ejecución se llevó a cabo en torno a las 6.00 horas (4.00 horas en España), sólo cuatro días después de que el Tribunal de Casación de Irak ratificara la sentencia. El juez Abbawi, que estuvo presente en la ejecución, afirmó a los medios de comunicación que Saddam Hussein "rechazó que le cubrieran su cabeza antes de que le pusieran en la horca, y así fue ejecutado". "Tenía en la mano un Corán, leyó las frases de la profesión de fe musulmana -'No hay más Dios que Alá y Mahoma es su profeta'- y no se dirigió en ningún momento al pueblo".

Por su parte, el consejero de Seguridad Nacional de Irak, Muafaq al Rubai afirmó que el ex dictador "pareció sólido y no se resistió a la muerte". "No, no temía la muerte. Cuando se acercó al lugar donde está la horca me miró y me pidió que no tuviera miedo", declaró Rubai a la televisión estatal iraquí 'Al Iraquiya'. La única petición de Saddam Hussein fue que su copia del Corán "fuera entregada a un hombre que se llama Bandar".

Según Al Rubai, el cadáver de Sadam Husein será entregado a su familia, aunque no detalló cuándo. La hija mayor del ex dictador, Raghad Sadam, ha pedido que su padre sea enterrado en la capital yemení, Saná, para que el cadáver sea trasladado a Irak "tras la salida de la tropas de ocupación".

REACCIONES EN IRAK

Momentos después de la ejecución, las autoridades iraquíes impusieron un toque de queda de cuatro días en Tikrit, la ciudad natal de Sadam, así como en varias localidades cercanas, en previsión de posibles disturbios por la ejecución de Sadam. En otras regiones de mayoría chií podían verse a grupos grupos chíies disparando al aire en señal de alegría, igual que en las regiones kurdas, que acusan al ex dictador de la muerte de decenas de miles de kurdos durante la campaña de 'Al Anfal' ('Botín de guerra'), lanzada por el Ejército contra el Kurdistán a finales de los años ochenta.

En los barrios y ciudades suníes no se ha registrado ninguna reacción popular y sólo se escucharon los gritos de 'Alahu Akbar' ('Dios es el más grande') desde las mezquitas, con ocasión del inicio de la fiesta musulmana de Eid al Adha (el Sacrificio). Sin embargo, las reacciones violentas no se hicieron esperar y una cadena de atentados asoló Bagdad a lo largo del día, ataques que se interpretaron como una respuesta de los suníes baazistas partidarios de Saddam Hussein.

Al menos 70 personas murieron y un centenar más resultaron heridas en dos ataques diferentes. El más grave de ellos, aunque fue el que menos víctimas dejó, ocurrió en el noroeste de Bagdad, en el barrio de Hurriya, donde dos coches bombas destruyeron una calle comercial y un tercero reventó cerca de una escuela de primaria. En Kufa, al sur de la capital, otro coche bomba se llevó la vida de 35 personas e hirió a otras 45.