MADRID, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, propuso hoy incluir "el elemento árabe" en el Cuarteto para Oriente Próximo así como la celebración de una conferencia con el fin de contar con los "elementos políticos" que permitan avanzar hacia una solución del conflicto en la región. Asimismo, rechazó el "escepticismo" que suscita la convocatoria del encuentro internacional entre algunos sectores, sobre todo Israel.
Moratinos consideró hoy en la clausura de la conferencia 'Madrid+15' organizada por varias organizaciones de la sociedad civil que para que la 'Hoja de ruta' pueda "ponerse en marcha" hace falta una actuación más activa del Cuarteto. A juicio del titular de Exteriores, "ha llegado el momento de que se amplíe al menos a los países principales más influyentes que podrán acompañar los esfuerzos de la Unión Europea, Estados Unidos, Rusia y de la Liga Árabe, y por qué no al responsable" de esta organización panárabe.
Con ello, dijo el ministro, "tendremos dentro del Cuarteto a los principales actores". Además, "si a esto ayuda y acompaña una conferencia internacional tendríamos los elementos políticos necesarios para una nueva realidad". En este sentido, Moratinos dijo no entender el "escepticismo" expresado por algunos respecto a la convocatoria de una nueva conferencia internacional como la que hubo en Madrid en 1991.
"Muchos consideran que mi obsesión y mi preocupación por una conferencia internacional parece algo obsesivo y un tanto ingenuo", afirmó, asegurando que todavía no ha encontrado "elementos que me digan por qué ese escepticismo". "Israel hasta ahora siempre teme la conferencia internacional pero no ha analizado las ventajas y posibilidades que podría tener" ésta, opinó.
Por su parte, el alto secretario para la Política Exterior y la Seguridad Común (PESC), Javier Solana, centró su intervención en subrayar que "ha llegado el momento de actuar" puesto que "es imposible avanzar paso a paso". Según el responsable europeo, "tenemos que abordar la cuestión en su totalidad" y dado que esto es complicado, dijo, "al menos" habría que abordar el conflicto palestino-israelí.
Ahora, afirmó Solana, "tenemos que dar el siguiente paso que consiste en poner el proceso político en marcha". Según el representante de la UE, "no es posible saber" si la 'Hoja de Ruta' --el plan de paz planteado por el Cuarteto-- lleva a alguna parte "porque no se ha puesto a prueba". En todo caso, opinó, esta incluye "todo lo que se necesita" por lo que lo único que falta "es voluntad política".
DESARROLLAR LA VOLUNTAD POLÍTICA
"Ha llegado el momento de desarrollar la voluntad política y poner en marcha el tren para llegar a su destino", insistió, previniendo de que es "importante contar con el 'paraguas' árabe en la negociación" y que "nunca podremos avanzar con el odio". "Tiene que generarse un clima adecuado en nuestra sociedad para que el proceso pueda avanzar", aseveró.
Por último, advirtió de que "si en el primer semestre de 2007 no conseguimos un marco para el proceso, tengo dudas de que podamos hacerlo antes de 2008". En la rueda de prensa posterior, dijo que ahora su "obsesión es el tiempo" y justificó este plazo de seis meses recordando que después Estados Unidos se sumirá en la campaña electoral para las presidenciales "lo que complica más las cosas".
En cuanto a la propuesta de Moratinos de incluir a los países árabes en el Cuarteto, del que él forma parte, Solana dijo no estar "seguro de si es una buena idea" o "si los árabes quieren ser parte del Cuarteto". En todo caso, se mostró "abierto a reflexionar sobre ello" y dijo que lo importante "es mantener una estrecha relación con los países árabes" y que el Cuarteto mantenga encuentros con ellos "lo más frecuentemente posible".
El ministro de Exteriores coincidió con Solana en que el tiempo apremia y si no se logran avances en el primer semestre de 2007, "será muy difícil por no decir imposible reconducir el proceso de paz". Asimismo, incidió en que "lo que tenemos que hacer es actuar y poner el tren en marcha, como ha dicho Solana".
A ello ayudaría, opinó, el "centrar la prioridad de nuestros objetivos" pero sin perder nunca de vista "la globalidad del proceso, porque los actores exteriores también participan". Así, aunque insistió en la "centralidad" del conflicto palestino-israelí, dijo que también hay que resolver las cuestiones de Líbano y Siria.
