MADRID, 14 Mar. (OTR/PRESS) - El PSOE ha encontrado, en la acusación por fraude fiscal al novio de Ayuso, el argumento perfecto para desviar la atención del caso Koldo. Así, el martes, con la comparecencia de Pedro Sánchez en el senado, y este miércoles, en la sesión de control en el Congreso, el circo estaba asegurado. Pero todo comenzó con la rueda de prensa posterior al Consejo de ministros. La ministra portavoz, Pilar Alegria, hacía juegos de palabras con la "fruta" para pedir explicaciones a la presidenta madrileña. El jolgorio no acabó aquí, porque un ministro tras otro no desaprovecharon la presencia de un micrófono cerca para sacar a colación la corrupción del PP.