El texto obliga a inscribir estos pisos en un registro oficial de actividades
VITORIA, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
La nueva Ley vasca de Turismo, que regula las viviendas para uso turístico y establece la obligación de que estén inscritas en un registro oficial, ha entrado este miércoles en vigor con el objetivo de definir las condiciones en las que actúan los operadores del sector y de garantizar su seguridad y la de los usuarios de sus servicios.
Esta ley, aprobada el pasado 28 de julio en el Parlamento vasco pero cuyos efectos prácticos comenzarán a partir de ahora, dedica una parte importante de su contenido a las viviendas y habitaciones de pisos particulares para uso turístico, unos recursos que algunos operadores del sector consideran una forma de competencia desleal.
Con el fin de mejorar la regulación de esta actividad, le ley incluye una definición de la misma. El texto considera viviendas para uso turístico aquellas que, con independencia de sus características, "se ofrezcan o comercialicen como alojamiento por motivos turísticos o vacacionales".
La definición añade que se trata de viviendas que son "cedidas temporalmente" por su propietario o por la persona que las gestiona "de forma reiterada y habitual" a cambio de una contraprestación económica y en condiciones de "inmediata disponibilidad".
"DECLARACIÓN RESPONSABLE"
En el caso del alojamiento en habitaciones de viviendas particulares para uso turístico, se establece que una misma titular "no podrá ofertar o comercializar habitaciones en más de una vivienda", puesto que en ese caso, se consideraría que se trata de un establecimiento hotelero.
Las personas que vayan a destinar una vivienda o habitación a un uso turístico deberán realizar, al igual que cualquier otro agente que vaya a iniciar una actividad en el sector, una 'declaración responsable' de cumplimiento de una serie de obligaciones. Esta declaración tendrá como efecto inmediato la inscripción de la actividad en el 'Registro de empresas y actividades turísticas de Euskadi'.
"NUEVO MARCO"
Uno de los apartados de la ley establece las condiciones que determinarán la clasificación de los establecimientos en distintas categorías o niveles. A la hora de asignar una u otra categoría, se tendrá en cuenta la situación y los equipamientos del establecimiento, la calidad de su oferta, las prestaciones para personas con discapacidad, la calidad del empleo generado o el conocimiento y uso de las lenguas oficiales de Euskadi y de otros idiomas.
El Gobierno vasco ha puesto a disposición de los agentes del sector que así lo deseen las delegaciones territoriales de turismo de Vizcaya, Guipúzcoa y Álava, en las que se atenderá a las dudas que puedan surgir ante la entrada en vigor de esta normativa.
El Ejecutivo autonómico ha expresado su confianza en que la nueva ley responda a las necesidades surgidas en el sector en los últimos años. El texto legal pretende, así, configurar "un nuevo marco que ordene y proteja la realidad actual del sector turístico".
