López Veiga incide en que el Puerto de Vigo puede ser competitivo "si no hay un colectivo minúsculo que lo impide"

Puerto De Vigo
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 25 mayo 2016 19:58

Preocupación por el descenso en el número de cruceros previsto para 2017

VIGO, 25 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo, Enrique López Veiga, ha mantenido que el Puerto vigués puede ser competitivo "si no hay un colectivo minúsculo que lo impide", en referencia a los trabajadores de la estiba y desestiba, a los que ha achacado que "pueden poner en riesgo la economía de toda una ciudad" y de las empresas de distintos sectores como la automoción y pesca.

En una entrevista concedida a la Radio Galega y recogida por Europa Press, López Veiga ha señalado que la solución ante esta problemática, que derivó en la marcha de la multinacional Maersk a Marín, pasa por que la parte social acceda a "renegociar unas condiciones nuevas de estiba y desestiba en la línea de los costes".

Así las cosas, ha censurado que "Vigo es uno de los puertos más caros para carga y descarga" y eso "está provocando una fuga de tráficos a fuera"; por ello ha animado a "tratar de llegar a un acuerdo" para poder "mejorar los rendimientos" --ya que ha considerado que los trabajadores "no están rindiendo como deberían"-- y alcanzar la "disminución de costes".

"Esos tiempos de monopolio afortunadamente ya se tienen que acabar. Se tenía que haber terminado hace muchos años", ha incidido el presidente de la Autoridad Portuaria, que ha insistido en que el Estado "tiene que intervenir" porque esta es "una situación generada por el propio Estado". "Tenemos una legislación que provoca esta situación", ha resumido.

En este marco, ha mantenido que "el movimiento hacia Marín no es natural porque la industria está en Vigo" y el puerto vigués tiene unas condiciones naturales por las que "debería ser el puerto de destino". No obstante, ha agregado que si Vigo no resuelve sus problemas de falta de competitividad, "el puerto y la industria viguesa van a tener muchos problemas".

CRUCEROS

Además de la marcha de Maersk y los altos costes del Puerto, López Veiga ha mencionado que otra de las cuestiones que le preocupan es el descenso en el número de cruceros previsto para 2017, ya que aunque ha reconocido que esto se explica por motivos "razonables", ha señalado que han tenido "la mala suerte de que vinieron todos juntos".

Así, ha mencionado entre las causas de la falta de cruceros el terrorismo en el Mediterráneo, la apertura de destinos alternativos para cruceristas que repiten, y los costes combustibles en el año en que se hicieron las planificaciones. "Esto es reversible pero va a exigir un esfuerzo tremendo", ha subrayado, si bien ha adelantado que en 2018 no cree que el efecto "sea tan negativo".

ELECCIONES

López Veiga ha reconocido que la incertidumbre sobre la formación del próximo Gobierno español está afectando a la Autoridad Portuaria porque necesita "una urgente modificación de la legislación" para poner fin al monopolio de la Sagep (Sociedad Anónima de Gestión de Estibadores) y "un gobierno en funciones no puede legislar".

"Estamos en un problema de un 'impasse'. Si hubiésemos resuelto esto después del 20 de diciembre estaríamos en una situación completamente distinta de la que estamos", ha reparado, antes de apuntar que el nuevo gobierno, sea el que sea "no tiene alternativa" y tendrá que hacer esta reforma "porque así lo obliga la sentencia del Tribunal de Luxemburgo".

Cuestionado por un escenario en el que se produjese un cambio por el que Podemos y PSOE lleguen al gobierno, el presidente del Puerto ha trasladado que "seguro que sí afectará a la economía y podría generar inestabilidad". "Cuando uno se empeña en aumentar el gasto cuando se sabe que es imposible es un disparate que acaba pagándose caro como es el ejemplo de Grecia", ha rematado.

Finalmente, acerca del calendario de elecciones marcadas por presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, López Veiga ha considerado que es "lo mejor que puede hacer" y ha subrayado que "da sensación de seriedad, solvencia, y de que Galicia marca sus propios tiempos". "No puedo estar más de acuerdo con eso", ha concluido.

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