MÁLAGA, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Málaga, María Victoria Romero, manifestó hoy, ante la propuesta de la candidata socialista a la Alcaldía de la capital, Marisa Bustinduy, de realizar diez debates en la decena de distritos de la Málaga ante los ciudadanos, que "no son un lugar para la polémica" y pidió a los socialistas que bajen "el tomo de crispación".
Romero solicitó a los responsables socialistas que "rebajen el tono de crispación que han elevado porque no trae nada bueno y los ciudadanos lo deploran"; e insistió en que desde el PP "haremos una campaña positiva, cargada de ilusión, y de nuevos proyectos", añadiendo que "lo que no vamos a hacer es trasladar la crispación a la calle".
Precisamente, la portavoz popular recordó que al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, "no le hace falta dialogar con los vecinos porque lleva desde 1995 ejerciendo esta responsabilidad". Reiteró que los socialistas "solo van a los barrios cuando están en campaña", a diferencia del primer edil cuya primera premisa "es diálogo permanente con los vecinos", precisó.
Por su parte, Bustinduy consideró que la negativa de De la Torre a debatir en los barrios radica en que "no tiene valor ni gallardía política para dar la cara ante los ciudadanos porque sabe que suspende el examen".
De hecho, la propuesta del grupo socialista "es la más limpia, más noble y con menos falta de intento de crispar en una campaña electoral", manifestó al tiempo que indicó que "el alcalde es el señor de las apariencias, se embarca permanentemente en promesas que incumple después, en cuestiones que nunca puntualiza y en falsas palabras".
Por este motivo, la candidata socialista subrayó la necesidad del primer edil de "rendir cuentas ante los ciudadanos, de la gestión, del nivel de cumplimiento de los compromisos electorales" y "le pido que tenga un poco de humildad y que se acerque a los barrios".
Bustinduy resaltó que el alcalde malagueño "dice que desconoce a cuánto asciende la deuda que tiene el Ayuntamiento" y eso se debe a que "parece que no le interesa", sobre todo "reconocer que el PP ha aumentado la deuda que heredó de los socialistas en un 5,4 veces, es decir la ha llevado a 824 millones de euros", explicó.
