MÁLAGA, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Málaga, Carolina España, demandó hoy a la ministra de Fomento y número uno en la candidatura socialista al Congreso, Magdalena Álvarez, que, "como malagueña, exija a sus compañeros del PSOE que mantengan la neutralidad" en lo que se refiera a las ciudades que aspiran a ser Capital Europea de la Cultura en 2016.
En este sentido, España declaró que "no vamos a caer en el error de pedirle que apoye la candidatura de Málaga, pero sí que exija neutralidad a sus compañeros socialistas", en referencia a ministros como Miguel Ángel Moratinos o Bernat Soria o el propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que dieron su apoyo a Córdoba.
"No es una competición europea porque obligatoriamente habrá una ciudad española", señaló en rueda de prensa la edil del PP, quien, por tanto, abogó por que haya "un marco de neutralidad y objetividad", de modo que la elección de la ciudad de España se haga en función de sus méritos.
De igual modo se pronunció hoy el delegado municipal de Cultura, Miguel Briones, quien insistió en que es "justo y necesario la concurrencia limpia", por lo que reclamó "la mayor objetividad y equidad de los representantes, que se presume que son de todos los españoles".
El delegado de Cultura del Consistorio malagueño manifestó la necesidad de que haya "el máximo respeto a las ciudades candidatas, sean del signo que sean".
Precisamente, el pasado lunes el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, envió una carta a Rodríguez Zapatero para transmitirle que "como malagueño me siento indignado" y "como español me siento avergonzado", puesto que "no sabe cuál es su papel en esta materia", después de que el responsable del Ejecutivo central diese su apoyo a la candidatura de Córdoba.
De la Torre subrayó que el papel de un presidente "no es opinar y menos todavía apoyar" sobre una cuestión que "está planteada desde Europa en base a un jurado, que forman 13 expertos, siete designados por los órganos de la Unión Europea y seis por cada gobierno, y que --tal y como precisó-- deben ser personas objetivas, que no tengan relación con ninguna de las ciudades planteadas".
