JAÉN, 3 Jul. (EUROPA PRESS) -
Dos vecinos de Jaén, A.M.M. y F.B.V., se han conformado con una pena de prisión de 18 meses tras de declararse culpables de un delito de hurto y otro de estafa. De esta forma, han admitido haber robado cerca de 9.000 kilos de aceituna en una finca de Mancha Real (Jaén) y haber estafado más de 400.000 euros a dos almazaras ubicadas en Espeluy y en Jaén capital.
En lo que respecta al delito de hurto, por el que les han condenado a doce meses de cárcel, los hechos se remontan a noviembre de 2015, cuando los acusados, "puestos de común acuerdo y animados de lucro", recolectaron sobre 8.000 kilos de aceituna en una finca de Mancha Real. Nada extraño en plena campaña de aceituna si no fuera porque ninguno de los dos acusados era propietario ni persona autorizada a recoger el fruto.
En ese mismo mes, los dos acusados volvieron a la misma finca y recolectaron otros 978 kilos de aceituna que no se pudieron llevar porque fueron sorprendidos por el propietario.
Los 8.000 kilos de aceituna se han valorado en 4.000 euros, cantidad que deberán abonar en concepto de responsabilidad civil.
Además, se le impone otros seis meses de prisión por un delito de estafa a dos almazaras jiennenses. La Guardia Civil ya estaba detrás de ellos en la campaña oleícola 2015-2016. Al comienzo de la misma llevaron miles de kilos a las almazaras, nada raro en la provincia si no fuera porque no son propietarios de olivos. Los agentes sospechaban de que pudieran formar parte de algún grupo organizado que durante esa campaña protagonizó numerosos robos de aceituna en diversas fincas próximas a la capital jiennense.
Supuestamente aportaban documentación falsificada como contratos de arrendamiento o autorizaciones para certificar el origen legal de la aceituna y así poder proceder a su venta, aunque este extremo no ha podido quedar acreditado, de ahí que las acusaciones particulares hayan optado por retirar el delito de falsedad en documento privado.
Lo cierto es que en octubre de 2015 se personaron en una almazara de Jaén capital para negociar la entrega en la misma de aceituna. Tras entregar toda la documentación, finalmente optaron por solicitar un adelanto a cuenta de algo más de 400.000 euros, tanto en dinero como en anticipo de aceite. Sin embargo, no había aceituna que no fuera la robada para poder cumplir con lo acordado.
Una vez descubierta la estafa, los dos acusados repusieron 49.000 euros y facilitaron la recuperación de casi otros 40.000 euros en aceite que se encontraba decomisado. Es por ello, por lo que las acusaciones particulares han contemplado la atenuante muy cualificada de reparación del daño. Teniendo en cuenta lo devuelto, como responsabilidad civil les queda hacer frente a la devolución de 351.278 euros.
A la otra industria aceitera, la de Espeluy, le adeudan 15.645 euros, cantidad que deberán devolver como responsabilidad civil. Para ello se han comprometido en abonar cuotas de 300 euros mensuales hasta liquidar dicha cantidad.
Con este acuerdo entre las partes ha quedado cerrado este caso en el que había otras tres personas más investigadas, dos hombres y una mujer, que se han sentando en el banquillo, pero a los que se ha retirado la acusación.
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