El SEPRONA investiga un hombre como presunto autor de un incendio forestal. - GUARDIA CIVIL - Archivo
SEVILLA 9 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha procedido a la investigación de 72 personas por su presunta implicación en alguno de los 592 incendios forestales y conatos declarados en Andalucía en 2020, tras esclarecer el origen de 173, el 93,23% causados por la acción del hombre.
En concreto, un total de 85 han sido provocados por negligencias, lo que supone un 63,9%, mientras que 35 fueron causados de forma accidental o fortuita (26,3%), 24 por causas naturales (18%) y 29 de forma intencionada (21,8%), según los datos aportados a Europa Press por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Benemérita.
Estas cifras también reflejan que el 33,8% de los incendios se producen por la quema agrícola de restos vegetales después de una faena o por regeneración de pastos y que de estos, 38 se deben a negligencias y siete a accidentes.
La diferencia radica en que la causa accidental se da cuando se tiene el permiso de las autoridades para hacer incinerar rastrojo y se toman las medidas de seguridad necesarias, pero por circunstancias externas, como un golpe de viento que no se logra controlar o el salto de una chispa, se genera un incendio, mientras que en una negligencia no se siguen las condiciones con las que se concedió la autorización o simplemente nunca la hubo.
Respecto a los fuegos accidentales, el resto se producen principalmente por chispazos en tendidos eléctricos (nueve) o el uso de automóviles (seis), además de sierras eléctricas, trabajos forestales, desbrozadoras, artefactos pirotécnicos, quema de basuras y fumadores.
En las negligencias se sitúan las líneas eléctricas (once), trabajos forestales (cuatro), hogueras (tres), así como también cristales o botellas de vidrio, barbacoa privada, cigarros, quema de basuras, soldaduras, desbrozadoras, sierras eléctricas, acciones o juego de menores o incluso trabajos de ahumadores de colmenas.
En relación a los incendios generados de forma intencionada, la Guardia Civil no especifica el origen de nueve de los 29 esclarecidos. El resto se deben principalmente a actos de conflictos entre las personas (12), para facilitar la caza (dos), acciones de venganza (dos), pirómanos (dos), incendiarios y vandalismo con uno cada uno
De los 24 incendios esclarecidos provocados por causas naturales, 20 se deben a rayos de una tormenta y uno por combustión espontánea, mientras que no ha sido posible especificar el origen de los tres restantes.
La Benemérita precisa que, además de los 72 personas investigadas por su implicación en los incendios, ha interpuesto 20 infracciones administrativas y detenido a tres personas. Los incendios ocurridos se han saldado con dos heridos leves y 79 desalojados.
PENAS DE HASTA SEIS AÑOS DE CÁRCEL PARA NEGLIGENCIAS
Las investigaciones de los incendios forestales se realizan mediante una inspección ocular del lugar en el que se originan los incendios, mediante la cual se trata de esclarecer las causas y, en el caso de hallar indicios de delito, identificar a sus responsables.
En el caso de Andalucía, estas se realizan por agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y por los agentes de medio ambiente de la Brigada de Investigación de Incendios Forestales (BIIF) de la Junta.
Así pues, las negligencias pueden acarrear multas de 18 a 24 meses y penas de tres a seis años de prisión, pudiendo incrementarse hasta 20 años si hubiera riesgo para la vida o integridad física de la población. En este sentido, la administración ha incidido en reiteradas ocasiones en que los incendios no representan sólo estadísticas, hectáreas quemadas o superficie medioambiental arrasada, sino que hay otro factor que es la cara humana de los incendios, los profesionales que intentan controlarlos y los ciudadanos que tienen que salir de sus casas amenazados por las llamas, abandonando sus enseres con la incertidumbre de no saber si los encontrarán a su regreso.
PREVENCIÓN Y AUTOPROTECCIÓN
Para evitar incendios forestales, la Dirección General de Protección Civil y Emergencias recomienda prestar especial atención a las normas de la región en que se vive sobre prevención de incendios y periodos autorizados para realizar quemas de rastrojos, evitar arrojar cigarrillos, basuras y, especialmente, botellas de vidrio, que hacen efecto lupa con el sol, así como no encender fuegos u hogueras en el monte y terrenos próximos.
Respecto a las medidas de reacción, recomienda avisar al servicio de Emergencias 112 inmediatamente si descubre el fuego en su inicio y en caso de verse sorprendido por un incendio, evitar adentrarse en el monte o bosque e ir siempre por zonas de gran visibilidad y libres de combustible.