JAÉN, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
El hombre acusado de un delito de homicidio por estrangular en su domicilio ubicado en la barriada del Puente Tablas de Jaén capital a su compañera sentimental, Rocío Estepa, afirmó hoy que no quiso matar a esta joven maestra sevillana y declaró que, de hecho, él la "quería mucho".
En el juicio, que se celebra desde hoy en la sección segunda de la Audiencia Provincial bajo el procedimiento del Tribunal de Jurado, este hombre, Martín Javier O., explicó que el día de los hechos ambos se enzarzaron en una fuerte discusión "a voces y a gritos" en la que se hicieron reproches mutuos hasta que, en un momento dado, le puso sus manos sobre su cara --"para que me escuchara", alegó-- mientras que ella estaba sentada en la cama y él de pie.
"Cuando me di cuenta mis manos estaban en su cuello, no recuerdo si apreté ni cuándo ni cómo", relató el procesado, quien recalcó que "de pronto" se dio cuenta de que la mujer "no se movía", tras lo que señaló que se le vino "el mundo abajo". "Solo recuerdo mis manos en sus mejillas y, de pronto, en su cuello", sostuvo ante los nueve miembros del jurado, integrado por una mujer y ocho hombres.
Al ser preguntado para que ofreciera alguna explicación ante el hecho de que los forenses certificaron que la causa de la muerte fue asfixia y no estrangulamiento, Martín O. negó haber tapado bien con sus manos bien con alguna almohada la boca o la nariz de Rocío Estepa. Igualmente, rechazó haber movido después el cuerpo de la víctima y afirmó que no recuerda tampoco haberla tapado con una colcha, pese a que la policía la encontró acostada en la cama y cubierta por esa manta.
El caso es que, según especificó, tras percatarse de que la joven había fallecido, intentó suicidarse con un cable, pero al final acabó llamando a un abogado que conocía por un asunto de tráfico y le contó que le había hecho "daño" a la mujer, tras lo que este le instó a que se entregara la Policía, cosa que hizo.
Martín O., nacido en Mendoza (Argentina) y de 36 años de edad, explicó que ese día discutieron porque Rocío Estepa le había estado preguntando por su ex mujer argentina y los dos hijos que tuvo con esta allí. "Discutimos, nos empujamos y nos dimos voces y yo lo que intentaba era que me escuchara entre los gritos", insistió, para agregar después que ese día en particular ella le hacía "más daño" con sus palabras en comparación con las otras veces que discutieron por este u otros temas.
Al respecto, explicó que venían arrastrando estas peleas sobre su vida en Argentina desde hacía tiempo, tanto que en ocasiones todo era "enfermizo". También proclamó que aunque no tenía un trabajo fijo iba concatenando diversos empleos en los que no le hacían contrato, pero que le permitían ir juntando dinero junto a Rocío Estepa.
Tras la declaración del acusado, a lo largo de esta tarde continúa la práctica de la prueba a través de las testificales de los testigos propuestos por las diferentes partes personadas mientras que mañana está previsto que comparezcan los peritos.
CALIFICACIONES.
Para el ministerio fiscal, este hombre es responsable de un delito de homicidio por el que pide que sea condenado a 15 años de prisión, calificación que comparten tanto la Abogacía del Estado como el letrado de la Junta de Andalucía.
Por su parte, las acusaciones particulares, que representan a los dos hermanos de Rocío Estepa, consideran que este caso "no es un simple homicidio", sino que se encuadra en un delito de asesinato en el que se da la circunstancia modificativa de la responsabilidad penal de parentesco y, por todo ello, reclaman una pena de 20 años de cárcel.
Finalmente, la defensa entiende que su cliente es responsable de un delito de homicidio en el que aplica la atenuante de arrebato por lo que solicitan que la pena privativa de libertad sea de tres años.
