Junta señala la vuelta en 2017 a niveles del PIB previo a la crisis "contrarrestando" la falta de inversiones del Estado

SEVILLA 20 Sep. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Economía, Hacienda y Administración Pública, Antonio Ramírez de Arellano, ha destacado este jueves que la economía andaluza evoluciona en una "senda de recuperación sostenida" que le ha permitido recuperar en 2017 el nivel de Producto Interior Bruto (PIB) previo a la crisis, si bien ha aludido al "gran esfuerzo que ha tenido que hacer para contrarrestar" las deficiencias de inversiones y de financiación del Estado.

Según ha explicado en comisión parlamentaria, en los últimos cuatro años el avance acumulado del PIB andaluz se ha situado en el 11,2 por ciento, lo que representa 3,4 puntos por encima de la zona euro y 2,5 puntos superior a la media de la Unión Europea. "Se ha retomado el proceso de convergencia interrumpido con la crisis y esperamos que Andalucía alcance en 2018 el PIB más elevado de su historia", ha subrayado.

Ramírez de Arellano ha lamentado que existen mecanismos estatales previstos constitucionalmente para corregir desequilibrios económicos y avanzar en la convergencia regional que se han recortado en los últimos años y que deben ser recuperados. En este sentido, ha señalado que el Fondo de Compensación Interterritorial (FCI) se ha reducido, en media anual, a más de la mitad entre 2012 y 2018. Por su parte, la inversión pública media para Andalucía en este mismo periodo
también ha sufrido una merma importante, bajando de los 3.991,3 millones de euros de la legislatura 2008-2011, hasta los 1.659,3 millones de euros.

A pesar de estos recortes, el consejero ha destacado que "el proceso de convergencia se ha retomado" y se manifiesta en el mercado laboral, ya que Andalucía "lidera el descenso del paro y la creación del empleo" a nivel nacional. En términos absolutos, en los últimos cinco años, la comunidad registra 536.900 parados menos y 422.600 ocupados más, mientras que, en términos relativos, Andalucía es "la tercera región que más empleo ha creado en España", con un incremento del 16,2 por ciento en la ocupación, frente al promedio del 12,1 por ciento en el resto de las comunidades.

Ramírez de Arellano ha explicado que la recuperación económica de la comunidad se sustenta en la reorientación del modelo productivo, con un crecimiento más sostenible basado en la internacionalización, la inversión, la industrialización, el emprendimiento y la mayor dimensión del tejido empresarial, entre otros factores. En este sentido, ha recordado que en la última década el peso del sector exterior en el PIB andaluz ha pasado del 34 por ciento al 45 por ciento, con casi 31.000 millones de euros vendidos en 2017, lo que sitúa a Andalucía como "la segunda región más exportadora de España", gracias al trabajo de más de 20.000 empresas exportadoras.

Asimismo, ha subrayado que la inversión ha registrado un incremento del 4,8 por ciento en los últimos tres años, lo que representa un punto y medio superior al registrado en la zona euro.

PP-A: "ANDALUCÍA, EN EL FURGÓN DE COLA" DE LA UE

Por su parte, el diputado del PP-A Pablo Venzal ha criticado que el consejero no haya querido entrar en el asunto que se abordaba directamente y ha advertido de que Andalucía carga las tintas sobre la falta de financiación autonómica, "algo que afecta a todas las comunidades".

Así, ha señalado que el PIB de Andalucía se encuentra por debajo del 75 por ciento de la media del PIB europeo y "la única vez que nos hemos acercado ha sido consecuencia de la entrada de países en vías de desarrollo a la Unión Europea (UE)". Además, ha añadido que "hoy estos países han aumentado su PIB, mientras que Europa ha vuelto a colocar a Andalucía en el furgón de cola y alejándonos de la convergencia, después de la cantidad ingente de recursos y de endeudar a Andalucía".

Venzal ha señalado que los indicadores muestran una desaceleración económica de la comunidad y ha instado a hacer algo, por lo que ha pedido al consejero propuestas al respecto. Además, ha criticado que Andalucía mantenga "unos impuestos altos y la renta per capita sea de las más bajas".