GRANADA, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
El delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, dejó hoy en manos del poder judicial la investigación del crimen del celador del Hospital Virgen del Rocío, presuntamente tiroteado por Ricardo Suárez, el padre de una niña a la que el celador atropelló sin causarle daños graves, aunque recordó que "la Policía no descartó en ningún momento que pudiera haber más de un autor de los disparos".
En declaraciones a los periodistas tras participar en el acto de toma de posesión de cuatro nuevos comisarios en Granada, López Garzón, que alabó la "sólida" actuación de la Policía en este caso, respondió así al ser preguntado por la información publicada en 'El Correo de Andalucía', que señala que un testigo protegido ha declarado que el hermano de Ricardo Suárez disparó antes que éste al coche del celador.
Así, señaló que "de hecho, la prueba ya la Policía la había planteado y, por tanto, ahora es el poder judicial al que le corresponde ver si efectivamente ha habido más de un autor de los disparos", manifestando que no le corresponde "afirmar o confirmar cuestiones judiciales".
No obstante, el delegado del Gobierno declaró que "cuando ocurrió este hecho tan triste" dijo que el caso estaba desde el punto de vista policial "tan perfectamente instrumentado que en el momento en que estuviera a disposición judicial el presunto o presuntos autores iba a ser difícil no tenerse que declarar culpable con todas sus consecuencias".
Para López Garzón, "tanto los testigos como la instrucción de la Policía era tan sólida y estaba tan bien trabajada" que existía "la certeza" de que una vez puesto a disposición judicial "el peso de la ley iba a ser inexorable".
