El Centro de Especialidades Inocencio Jiménez de Zaragoza pone en servicio la mayor Unidad de Hemodiálisis de Aragón

Celaya inaugura la Unidad de Hemodiálisis del Inocencio Jiménez
GOBIERNO DE ARAGÓN
Actualizado: martes, 12 junio 2018 18:15

ZARAGOZA, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -

La nueva unidad de Hemodiálisis del Centro de Especialidades Inocencio Jiménez de Zaragoza ha abierto ya sus puertas, con una capacidad potencial de realizar 15.000 diálisis al año y la tecnología más avanzada disponible.

Las nuevas instalaciones, dependientes del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza, cuentan con una superficie de más de 800 metros cuadrados, una sala de tratamiento con 24 puestos de diálisis, ampliables a 26 y un puesto para pacientes que requieran medidas de especial aislamiento.

Todo ello supone una capacidad para atender a unos cien pacientes semanales en turnos de mañana y tarde y la convierte en el mayor centro de hemodiálisis pública de Aragón, ha informado el Ejecutivo autonómico en una nota de prensa.

Las instalaciones están dotadas con la última tecnología, gracias a un contrato plurianual hasta 2024 que ha supuesto una inversión de 4,5 millones de euros. En concreto, cuentan con una planta de doble osmosis inversa, que proporciona el agua ultrapura necesaria para la realización de técnicas especiales de diálisis como la HDF Online (hemodiafiltración en línea).

Además, dispone de 30 monitores de hemodiálisis de última generación, cuatro de ellos con capacidad para hacer diálisis sin acetato y con perfiles de potasio, indicada en pacientes que presentan arritmias durante las sesiones de diálisis.

En el Hospital Clínico se realizan las HD-HCO (hemodiálisis con filtro de alto poro, high cut-off, en inglés) para el tratamiento del mieloma múltiple, una técnica del que es centro de referencia para todo Aragón.

SEGURIDAD Y CONFORT

El consejero de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sebastián Celaya, ha visitado las nuevas instalaciones, acompañado del gerente del sector, José Ignacio Barrasa, y del jefe de servicio de Nefrología, Rafael Álvarez Lipe, de las que ha dicho que "incrementan notablemente la seguridad y el confort a los pacientes".

"Sin duda estamos ante una de las mejores Unidades de Diálisis de España, tanto por su diseño como por su tecnología y por eso tiene la aspiración de que en un futuro pueda convertirse en un centro de enseñanza de hemodiálisis para otros centros", ha añadido el jefe del servicio de Nefrología, Rafael Álvarez Lipe.

El Ejecutivo autonómico ha aclarado que la calidad y la seguridad del paciente han sido la prioridad en el diseño de la nueva unidad y por eso se ha instalado un programa informático avanzado (Nefrolink) que permite gestionar los tratamientos de diálisis y la conexión en tiempo real con el Hospital Clínico Lozano Blesa.

De este modo, toda la información que se va produciendo durante las sesiones de diálisis se va volcando directamente a los ordenadores, así como las analíticas que se realizan al paciente y esos datos pueden ser consultados por los nefrólogos en tiempo real.

Todo esto se completa con un monitor desfibrilador, ECG de 12 vías, monitor de constantes vitales, pulsoximetros, ecógrafo, dos frigoríficos con monitorización constante de la temperatura y autoanalizador para analíticas urgentes.

Para proporcionar el máximo confort a los pacientes, se ha dotado la unidad con 24 sillones nuevos y dos camas, 24 monitores de TV de 32 pulgadas y control individual de audio para cada paciente, dado que permanecen en diálisis cuatro horas por sesión, tres veces por semana. Completan la unidad, consultas tanto de Nefrólogo, como de Enfermería, sala de reuniones y cuarto de reparación de monitores.

PUESTA EN MARCHA PROGRESIVA

La puesta en marcha de esta unidad será progresiva e, inicialmente, está previsto que durante el primer año funcione tres días a la semana en jornadas de 12 horas, con sesiones de diálisis de mañana y tarde, por lo que su capacidad será de dializar a 48 pacientes por semana.

A partir del segundo año, funcionará a pleno rendimiento, con una capacidad potencial de cien pacientes por semana frente a los 76 que actualmente puede dializar el Clínico.

Cuando esto suceda, en el Lozano Blesa quedarán solo ocho puestos para realizar la diálisis de los enfermos renales crónicos más graves, en sesiones de mañana y tarde y un turno especial de noche para personas que trabajan o que tienen problemas de horario.

Además, se mantendrá la sala para enfermos agudos --dotada con tres puestos--), una sala para enfermos en aislamiento y un puesto para pacientes con mieloma múltiple e insuficiencia renal crónica.

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