La Confederación Hidrográfica del Ebro prevé que la punta de la crecida del río llegue a Zaragoza el jueves

Actualizado: lunes, 2 abril 2007 17:09

ZARAGOZA, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), José Luis Alonso, ha advertido hoy, en rueda de prensa, de que la punta de la crecida del río Ebro, afectado en los últimos días por las intensas lluvias, llegará "mañana por la mañana a Castejón (Navarra), y aquí podría llegar entre 24 y 36 horas después, por lo que estaríamos hablando de que llegaría el Jueves Santo" a Zaragoza.

"Después de las dos avenidas" acaecidas en los últimos días, "y tal y como tenemos el río de agua, probablemente la avenida nos avanzará bastante rápido, pero haremos las previsiones con mayor exactitud" conforme pasen las horas y se observe cómo se comportan las precipitaciones.

La Confederación prevé que esta última riada sea similar a la del año 2003, "estamos ante una avenida superior a la ordinaria y confiemos en que se acabe la racha de lluvias", pero hasta el momento las previsiones de la CHE se han visto superadas, al precipitar más agua de la prevista en las últimas horas.

"Ahora la previsión es que la tormenta que forma una diagonal que cruza el eje del Ebro, está girando manteniendo el eje en la parte norte, es decir, en la zona que más nos preocupa a nosotros es donde van a persistir las lluvias", aseguró Alonso. Por ello, la Confederación se mantendrá en alerta, y ya ha avisado de que "la prioridad absoluta es la defensa de las poblaciones".

El pasado día 27 de marzo, explicó José Luis Alonso, "constituimos una comisión de seguimiento de la avenida", tal y como se procede en caso de crecidas del río, y desde ese día "hemos tenido sucesivos frentes de lluvias" que han afectado a la cuenca del Ebro. "El frente de lluvias nos ha entrado por el Mediterráneo y ha ido subiendo por el Ebro con una cierta dirección, un poco más hacia el norte que la del propio eje del Ebro", indicó.

Así, "se nos han concentrado las lluvias en una zona en la que teníamos los embalses ya bastante llenos", como es en "la parte alta de Navarra y en la parte alta del río Aragón, zonas que nos preocupan mucho".

"En estos momentos, barajamos unas cifras que se irán matizando a lo largo del día de hoy según continúen las lluvias, pero ahora tenemos previsto que al final del río Arga, en Funes (Navarra), podamos tener 1.100 metros cúbicos por segundo; que la parte alta del río Ebro, nos aporte 500; que el Ega nos aporte otros 200; y que el Aragón nos aporte del orden de los 1.000 metros cúbicos, previsiones que aún tienen cierto margen de error porque dependen de las lluvias de esta tarde", señaló el presidente de la CHE.

Estos datos, significan "que estaríamos ante una avenida extraordinaria, que en Castejón (Navarra) podría oscilar entre los 2.800 y los 3.000 metros cúbicos por segundo cuando llegue la punta de la crecida mañana por la mañana". No obstante, Alonso reiteró que "según sepamos la evolución de las lluvias daremos una información más pormenorizada".

En estos momentos, "en Sangüesa estamos intentando mantener el caudal por debajo de los 900 metros cúbicos por segundo que es el nivel en el que no causa daños importantes en la población y lo hacemos gracias a que desde ayer por la tarde a última hora, según las previsiones que teníamos, empezamos a desembalsar agua de Yesa, y a contener el agua en Itoiz". "Si no hubiésemos tomado estas medidas, hubiésemos superado probablemente los 1.100 metros cúbicos de agua en Sangüesa", aseguró.

Asimismo, la Confederación está trabajando para contener las riadas en otras zonas, "haciendo trabajar a los pantanos y embalses que tenemos e intentando que la avenida no supere esos niveles de los que estamos hablando, porque nos enfrentamos a una avenida superior a la ordinaria y que, depende de como vaya el día, se puede acercar a la del 2003", apuntó.

La tormenta que afecta a la cuenca del Ebro, "está en una diagonal que cruza inclinada el eje del Ebro, pero que sigue centrada en la parte alta de estos ríos que nos preocupan". Por ello, "se ha alertado a Protección Civil y trabajamos con las delegaciones del Gobierno y las Comunidades Autónomas, centrando nuestros esfuerzos en la defensa de las poblaciones".

LA MAYOR RIADA DE LOS ÚLTIMOS DÍAS

El presidente de la CHE, José Luis Alonso, indicó que durante los últimos días, "hemos tenido una serie de riadas y esta es mayor que las anteriores, y evidentemente pasa por un terreno ya saturado de agua y un río que tiene sus acuíferos también totalmente saturados, por lo tanto la escorrentía es mayor y la velocidad con la que bajará la avenida también, pero avisaremos con tiempo las horas en las que tenemos previsto que vengan las avenidas".

En principio, "la previsión meteorológica avisa de que las lluvias permanecerá hasta mañana, pero nuestro problema es la intensidad de las precipitaciones y los puntos en que vaya cayendo el agua", apostilló.

Así, el río Ega, el Arga y el Aragón, así como el río Ebro, "mantienen un caudal bastante intenso", motivo que ha llevado a la Confederación "a enviar maquinaria a los núcleos urbanos". "En Ejea de los Caballeros (Zaragoza) el agua se mantiene en 100 metros cúbicos y la punta llegó a 116, pero "una de las carreteras, la A-1204, está cortada por el desbordamiento del río Arba y estamos esperando que se pueda llegar a los 200 o 300 metros cúbicos por segundo allí; y en Tauste, estamos en 130 metros cúbicos y sigue para arriba, pero insisto en que son caudales que estos cauces pueden admitir", advirtió.

En otras localidades zaragozanas como Pradilla, donde el agua ya afectó las calles del casco histórico, "confiamos en que se hizo una mota suficiente, que además se impermeabilizó y era bastante moderna, y confiamos en que la mota tal y como está ahora mismo calculada nos aguante, pero --reconoció-- la mota que se nos vino abajo el sábado en Pradilla estaba consolidada, y nadie pensó que fuera a ceder. Cuando el río baja con mucha agua es imprevisible saber el punto exacto en el que se producirán los problemas", recordó.

Además, existe una "pequeña punta que baja por el río Gallego pero que no va a tener importancia, porque va a llegar al eje del Ebro bastante antes que la que baja de arriba por lo que no se va a sumar" a la crecida más fuerte que se espera.