Cruz Roja mantiene su intervención nocturna con las personas sin hogar durante la ola de calor

ZARAGOZA 9 Ago. (EUROPA PRESS) -

Cruz Roja en Zaragoza continua su intervención nocturna en la calle con las personas sin hogar a las que ofrece consejos para evitar los riesgos que conlleva el exceso de calor y les brinda recomendaciones para la salud, como ingerir líquidos para la hidratación, aplicar cremas solares y utilizar abanicos, además de darles información de los recursos existentes para evitar que duerman a la intemperie y les ayuden a salir de su situación.

En la atención diurna psico-social se trabaja la motivación al cambio y se da respuesta a necesidades básicas, han informado desde Cruz Roja Zaragoza en una nota de prensa.

En estos siete primeros meses del año, el equipo técnico ha atendido a 89 personas diferentes a las que ha acompañado con asistencia, orientación, información social y jurídica y gestiones administrativas.

En el proceso intervienen diversas áreas de la Institución, como intervención social, formación y empleo. En cuanto a atención nocturna, la Unidad de Emergencia Social (UES), formada por voluntariado muy comprometido, ha atendido a 149 personas diferentes.

La intervención del equipo técnico y voluntario es continua durante todo el año estableciéndose lazos de empatía que permiten un conocimiento profundo de las personas que duermen en la calle.

EL PERFIL CAMBIA

La temporada de cosecha en el campo, la demanda de empleo y el efecto migratorio genera un característico movimiento de personas sin hogar durante la temporada estival, a su paso por Zaragoza. La ciudad se convierte en un punto estratégico de traslado a otros pueblos y ciudades.

El perfil de las personas sin hogar cambia y se vuelve más itinerante. En general, es de mediana edad -si bien cada vez son más jóvenes- la mayoría de la comunidad europea, hombres nacionales y mujeres (aunque en menor medida en casos crónicos de calle) y extra comunitarios, gran parte procedentes de África. Marroquíes, argelinos, rumanos y rusos son algunas de las nacionalidades que más atendemos en su curso migratorio o de búsqueda de empleo.

Otros, que constan como indocumentados (por robo, extravío o negación de identificación), se ven abocados a la miseria sin poder acceder a recursos específicos. Actualmente, las necesidades se sitúan en torno a la ola de calor que vienen sufriendo las personas más expuestas a la intemperie, han recalcado.

En el albergue municipal se han dado a los usuarios charlas sobre la prevención de los efectos negativos de las altas temperaturas y el voluntariado de UES ofrece en sus recorridos nocturnos consejos de salud para aliviar el calor y ofrece agua, zumos, cremas solares y abanicos a las personas sin hogar.