El alcalde de Zaragoza subraya que una de las singularidades es que "además de ser una expo-espectáculo es una Expo de valores"
ZARAGOZA, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, cree que lo más destacado que aporta la Exposición Internacional, que ha abierto hoy sus puertas, es la convicción social de que "Zaragoza puede". En su opinión, "el bien inmaterial más importante que nos va a dejar la Expo 2008 es que Zaragoza puede conseguir cualquier cosa" y añade que "si queremos, podemos".
En una entrevista concedida a Europa Press, Belloch explica que la "clave" de este proceso es que "la gente comprende que cuando hay un proyecto de ciudad, cuando todo el mundo está implicado, y no sólo la clase política, sino todo el tejido social, se puede conseguir cualquier cosa".
Para Belloch, ese es el mensaje que "debe trasladarse al conjunto de proyectos de la ciudad" y hace especial hincapié en el proyecto de la Milla Digital, el desarrollo del barrio del AVE y el Plan Intermodal de Transportes (PIT). Sobre éste último, detalla que comprende desde la línea de cercanías y la línea de tranvía Norte-Sur y la de metro Este-Oeste, a los aparcamientos disuasorios y las peatonalizaciones. Subraya que "sólo con terminar el barrio del futuro y el PIT podríamos decir que el proceso de transformación de la ciudad ha concluido".
Sin titubeos reconoce el alcalde que conseguir que Zaragoza fuera la candidata ganadora de la Expo 2008 "es lo más satisfactorio que me ha ocurrido en la vida política, es el mayor éxito profesional de mi actividad pública", y afirma, en este sentido, que "mi periodo más satisfactorio, en términos políticos, es el de alcalde y especialmente estos últimos tres años cuando ganamos la Expo".
Belloch rememora cuando hace nueve años se lanzó la idea de que Zaragoza optase a ser candidata para acoger la Expo 2008, con motivo del bicentenario de la Guerra de la Independencia y del centenario de la Exposición Hispano-Francesa de 1908. La candidatura era el "punto estrella" del Programa electoral municipal del PSOE de 1999, entonces se recibió la propuesta con escepticismo, incluso dentro del propio Partido Socialista. "Al principio nadie creía en la Expo, no tenían inconveniente en que la liderara yo, pero se logró convencer al Ayuntamiento, luego al Gobierno de Aragón y finalmente al Gobierno de España". El alcalde destaca que "es la única Expo que nace de la ciudad".
Belloch asegura que el apoyo del Gobierno central fue definitivo, cuando "me apoyaron los anteriores vicepresidentes tanto Javier Arenas, como Mariano Rajoy", pero explica que por la cronología de los hechos, a la vicepresidenta Teresa Fernández de la Vega "le tocó la parte más activa de aportar el dinero y más esfuerzo. Le tocó la parte más dura y su apoyo es definitivo y explícito a la Expo".
El Pabellón Puente, el Pabellón de España, la Torre Agua y el Puente del Tercer Milenio son los edificios que primero enumera Belloch al ser preguntado por sus preferidos, pero también agrega: el Hotel Iberus, "que es una maravilla desde cualquier punto de vista", el Palacio de Congresos, el Pabellón de Aragón, la Pasarela del Voluntariado, "que gusta a todos los vecinos y a mí también".
SINGULARIDADES.
Belloch quiere dejar constancia de que una de las singularidades de la Expo 2008 es que "además de ser una expo-espectáculo es una Expo de valores, con debates como la Tribuna del Agua, de la que saldrá la Carta de Zaragoza, pero también se ha montado gran parte de ingeniería y arquitectura de nivel universal y eso que había menos tiempo que otras expos, sólo tres años".
El alcalde de Zaragoza no deja pasar por alto que paralelamente a la Expo 2008 se ejecuta el Plan de Acompañamiento, con la recuperación de las riberas de los distintos cauces de agua que atraviesan la ciudad y se muestra convencido de que tras la conclusión de este Plan la ciudad quedará "hasta más bonita" de cómo la soñó cuando abanderó la candidatura de la Expo.
"Siempre confíe en la maravilla del Parque Fluvial de 'Luis Buñuel' que va a ser una de los grandes legados de la Expo, pero lo que me preocupaba era comprobar si el concepto que teníamos nosotros de que el Ebro fuera la 'calle mayor' cambiaría la estructura, casi física, de la ciudad y ya hemos comprobado que es verdad. Comprobar antes de empezar la Expo que ese diagnóstico era certero y que los ciudadanos lo han adoptado como propio es un éxito evidente".
Agrega el alcalde que la ciudad se transforma no sólo en cantidad, sino en calidad de vida, porque tras el plan de riberas Zaragoza será la segunda ciudad con más metros cuadrados de zona verde por habitante y más repartidos, sólo por detrás de Madrid debido a la gran extensión de la Casa de Campo.
Belloch puntualiza que el Plan de Acompañamiento de la Expo "en términos económicos es más importante que la propia Expo, ya que llega hasta los 1.500 millones de euros frente a los 700 millones de euros de la Expo", y dice que además se han movilizado muchos recursos privados porque "por cada euro de inversión pública, la iniciativa privada ha aportado tres. Para Belloch, este dato "evidencia que Zaragoza es una ciudad dinámica, con una clase empresarial activa, que está satisfecha de sí misma. Es una ciudad en progresión, que ha querido dejar huella y marcar su posición en el mundo a través de este acontecimiento".
