TERUEL, 12 Feb. (EUROPA PRESS) - Agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de Teruel intensificarán los controles de alcoholemia durante la celebración de las fiestas medievales conocidas como las Bodas de Isabel de Segura.
El alcalde de Teruel, Miguel Ferrer, ha anunciado que "habrá controles de alcoholemia, las madrugadas, coordinados por la Guardia Civil y la Policía Local", unos controles que se llevarán a cabo para "controlar los accidentes de tráfico que pueden producirse". Ferrer ha recordado a "todos los que vengan a las Bodas que si conducen se encontrarán estos controles, por todos los puntos de la ciudad". Unos controles que se harán de Sarrión a Calamocha.
Esta mañana se ha reunido en el Ayuntamiento de Teruel la Junta Local de Seguridad con motivo de las Bodas de Isabel. Una reunión en la que ha participado el alcalde de la ciudad, Miguel Ferrer, así como la subdelegada del Gobierno en Teruel, María Victoria Álvarez, así como representantes de la Policía Local, Guardia Civil, Policía Nacional, 061 y Bomberos.
Más de 500 agentes se encargarán de velar por la seguridad durante los días de las Bodas de Isabel. Así, la subdelegada ha asegurado que "hemos reforzado la seguridad en todo el casco urbano de Teruel, en la carpa de los Planos". Además, habrá "un número importante de seguridad privada metida en el mercado", ha señalado Álvarez.
Miguel Ferrer ha señalado que el objetivo de esta reunión es el de "coordinar todos esfuerzos que se hacen, porque todos los cuerpos se encargan de alguna cosa especial, pero hay que coordinarse para que las fiestas transcurran en el más absoluto orden dentro de la acumulación de gente que se da cita".
Ferrer ha recordado que el principal problema en las Bodas de Isabel puede ser la gran acumulación de personas en determinados lugares y momentos, ya que Teruel duplicará estos días su población. Por eso, este año "no se pondrán en ninguna calle jaimas a los dos lados, sólo en uno. Esto facilita también la posible entrada de camiones de bomberos, de ambulancias".
En cuanto al ruido, el alcalde ha recordado que las jaimas y carpas, excepto la de los Planos, deben apagar sus equipos de sonido a la 01.30 horas de la madrugada, y los bares a las 03.30, excepto el fin de semana a las 05.30 horas.
Además, Ferrer ha asegurado que este año se ha "coordinado muy bien con la Fundación Bodas de Isabel el establecimiento de carpas y jaimas. Hay folletos donde figuran los puestos de venta, las jaimas, por dónde irán las comitivas, los espectáculos".
Así que a Ferrer no le ha quedado más que desear que "las fiestas transcurran con la más absoluta normalidad, que la gente se divierta, que vean los espectáculos y que respondan al gran esfuerzo que hace la Fundación, pero que las cuestiones de seguridad estén controladas y planificadas".
