HUESCA 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los rescates en barrancos aumentaron un 34 por ciento en el Altoaragón durante 2008 respecto al año anterior, mientras que el número de personas rescatadas que realizaban esta práctica se incrementó en un 51 por ciento.
Así se desprende del balance de rescates en montaña realizados por la Guardia Civil en 2008 y que hoy ha sido dado a conocer en rueda de prensa por parte del teniente coronel de la Guardia Civil, Carlos Crespo; el subdelegado de Gobierno, Ramón Zapatero, y el capitán de la Guardia Civil responsable de montaña, Pedro Garijo.
La acumulación de nieve en la montaña está propiciando una gran afluencia de visitantes al Altoaragón en este 2009, para quienes la Guardia Civil recomienda mucha precaución, ya que al mismo tiempo que esta acumulación hace más atractiva la práctica de determinadas actividades de montaña, eleva el riesgo de aludes.
"Este año hay mucha nieve igual que en el 2008, por lo tanto el riesgo de aludes se mantiene y en las estaciones de esquí se está haciendo un esfuerzo importante para poner todos los medios y evitar que las avalanchas puedan provocar víctimas", dijo Crespo.
Mucha nieve que se convertirá en agua y llenará los barrancos, cuyos descensos se han convertido en una de las prácticas que copan la intervención de los grupos de rescate de la Guardia Civil.
Crespo manifestó que "el año pasado había mucha agua en los barrancos y los hizo mucho más atractivos que en 2007 que fue un año con poca nieve y poca agua. En el 2009 parece que se van a cumplir las mismas expectativas que las del 2008, por lo tanto prevemos que tendremos una importante campaña de rescates en barrancos".
En 2008 murieron en las montañas oscenses 25 personas y en el año anterior 19. Una diferencia que Crespo justificó por las cuatro muertes a causa de avalancha de nieve, 3 de ellas en Formigal y una en Benasque. El número de intervenciones en rescates aumentó en 2008 un seis por ciento respecto a 2007 y el de rescatados un 15 por ciento, pasando de 442 a 512.
En estos momentos en los que la afluencia de esquiadores a los centros invernales es muy alta, la Guardia Civil aconseja regular la velocidad en pistas y mantenerse siempre dentro del dominio esquiable de la estación.