HUESCA 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los vendedores ambulantes no están de acuerdo con la rebaja del 20 por ciento en sus tasas que ha aprobado el Ayuntamiento de Huesca. Este colectivo solicita una rebaja del 50 por ciento, aunque ello suponga pagar el doble de lo que se abona en Zaragoza por un puesto.
Este colectivo se ha venido quejando del "excesivo coste" al que deben hacer frente por mantener sus puestos en el mercadillo, ya que la tasa municipal por metro lineal y día es de 3,95 euros. Aseguran que con esta tasa peligran 140 puestos de trabajo.
La Comisión de Hacienda del Ayuntamiento de Huesca acordaba, en las últimas horas, rebajar la tasa en un 20 por ciento, pasado de esos 3,95 a los 3,16 euros. Sin embargo los vendedores no creen que sea suficiente, según apuntó, en declaraciones a los medios de comunicación, el portavoz de los vendedores ambulantes, Emilio Jiménez. "Si en Zaragoza, dentro de la misma situación, estamos pagando anualmente 480 euros y en Lérida se está pagando 600, una rebaja de un 20 por ciento la agradecemos al Ayuntamiento, pero es insuficiente para mantener nuestros puestos de trabajo".
Jiménez aceptaría una rebaja del 50 por ciento, a pesar de que "aún con todo estaríamos pagando el doble de lo que se paga en Zaragoza". Además, considera que la rebaja debería haberse acordado con los propios vendedores ambulantes.