GIJÓN, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los diputados del PP en el Congreso de los Diputados, Alicia Castro y Leopoldo Bertrand criticó hoy al Ayuntamiento de Gijón por denunciar a los sindicalistas Cándido Carnero y Juan Manuel Martínez Morala y después "achacar la dureza de la sentencia a la modificación del Código Penal".
Carnero y Morala fueron condenados a tres años de prisión y al pago de daños por el titular del juzgado de lo Penal número 1 de Gijón, Lino Rubio Mayo, por causar desórdenes y daños en la vía pública durante las movilizaciones del astillero Naval Gijón.
Los diputados 'populares' argumentaron que fue un agente de la comisaría de policía municipal quien "en representación del ayuntamiento" entregó un informe con los daños producidos durante la movilización ".
Los dirigentes 'populares' recordaron además que fue el PSOE el que dio su voto afirmativo a esa reforma del Código Penal y que, "al no haberla modificado en tres años, está demostrando su total conformidad".
Castro Y Bertrand acusaron al equipo municipal de Gobierno de Paz Fernández Felgueroso (PSOE) y Jesús Montes Estrada (IU) de utilizar "pobres argumentos" para eludir sus "evidentes responsabilidades". "Es una penosa huida hacia delante intentando confundir a la opinión pública con débiles argumentos", afirmaron los 'populares'.
Por estas razones, los diputados del PP afirmaron que los gijoneses y el sector naval "merecen argumentos que aclaren esta lamentable situación".
"MANIOBRA" EN IZAR-GIJÓN
Por otro lado, Castro y Bertrand denunciaron también el crecimiento urbanístico de la ciudadad, "que no se le escapa a nadie" y acusaron al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de privatizar en dos millones de euros el astillero de Izar-Gijón, "totalmente saneado" y que incluye un solar.
Destacaron que la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega aseguró que este hecho garantizaba la continuidad del mismo y "pocos meses después el PSOE gijonés ya pide su traslado al Puerto de El Musel".
Estos hechos fueron calificados por los diputados del PP como una "maniobra" en la que están en juego "muchos miles de las antiguas pesetas que el Estado puede perder en esta operación".
