Sucesos.- Detenido en Gijón un hombre por el robo de unos 30.000 euros a una pareja de ancianos

GIJÓN 3 Oct. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Policía Nacional de Gijón detuvieron a un joven de 33 años, vecino de Mieres, como presunto autor de la sustracción de una cantidad aproximada a los 30.000 euros, propiedad de una pareja de ancianos. La investigación se inició a instancia de los familiares de los ancianos que denunciaron que habían detectado la presencia y compañía de un varón joven en el domicilio de sus parientes y en consonancia con esa nueva relación habían notado un deterioro físico, emocional y patrimonial en sus mayores, según un comunicado policial.

Los policías encargados de la investigación encontraron dificultades para contar con la colaboración de las víctimas ya que la mujer padecía varias dolencias crónicas y el marido sufría Alzheimer. Esta merma e sus capacidades físicas y volitivas les convierten en las victimas idóneas para los desaprensivos al costar poco esfuerzo ganarse su confianza y engañarles con el fin de conseguir un beneficio económico.

Los investigadores comprobaron que el varón denunciado había conocido a sus víctimas en un bar de copas cercano a su domicilio donde éste trabajaba de camarero. Tras unos primeros contactos, se ofreció a acudir al domicilio de los ancianos con la excusa de ayudarles en asuntos domésticos y hacer alguna reparación en el domicilio.

Durante esas visitas, la policía sospecha que pudo habese apoderado de un juego de llaves de la vivienda y también de las cartillas bancarias, que fueron encontradas en el registro que se le efectúo, y de las que no supo dar razón del hecho de tenerlas en su poder.

De este modo, aprovechándose de la situación y de las minusvalías que afectan a estas personas, supuestamente les solicitaba ayuda económica siempre con engaños, como que debían pagar facturas, hacer frente a recibos pendientes, llegando en una ocasión a indicarles que un familiar estaba detenido y debía pagarles la fianza para obtener su libertad.

También se pudo constatar que los requerimientos para que sacasen dinero eran cada vez más frecuentes, y que los reintegros "desaparecían del domicilio" al que el detenido tenía acceso libre, con y sin el consentimiento de sus moradores.

Los familiares llegaron incluso a cambiar la cerradura del domicilio y a desviar los teléfonos pero según manifestaciones de vecinos y testigos las visitas del detenido no cesaron y era frecuente verle merodear por los alrededores del portal.

Precisamente fue detenido por los agentes cuando accedía al domicilio de los ancianos una vez que la mujer acababa de realizar una extracción en el banco y regresaba a su vivienda. Le fueron incautadas nueve cartillas bancarias a nombre de las víctimas y varios extractos bancarios.

Según los denunciantes la cantidad sustraída podría superar los 30.000 euros. El detenido que tenía antecedentes por robo se negó a declarar en Comisaría. Pasó a disposición judicial que dispuso su libertad con cargos y una orden de alejamiento de las presuntas víctimas.