GIJÓN, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un gijonés, cuyas iniciales responden a J.N.C., se enfrenta a seis meses de prisión por instalar un depósito de combustible en su ciclomotor a sabiendas que era robado, según el informe fiscal al que tuvo acceso Europa Press. El depósito pertenecía a otro ciclomotor, que fue sustraído por un ciudadano argentino, M.S.S., que luego lo despiezó.
Para este último la Fiscalía solicita un año de cárcel, que será sustituida por la expulsión del país al estar en situación irregular en España, y al pago de una indemnización de 1.100 euros al propietario del vehículo. El juicio se celebrará mañana, a las 12.30 horas, en el Juzgado de lo Penal número 3 de Gijón.
Según el informe fiscal, en una hora indeterminada entre las 22.00 horas del día 26 de enero de 2007 y las 13.00 horas del día siguiente, el acusado M.S.S. sustrajo un ciclomotor que estaba estacionado en la calle de Río de Oro, valorado en 1.100 euros.
Posteriormente, el imputado entregó el depósito de combustible a J.N.C., quien lo adquirió, según la Fiscalía, pese a conocer su procedencia ilícita, y lo instaló en su ciclomotor, de donde fue recuperado el 10 de abril de 2007 cuando estaba estacionado en la calle de Poeta Luis Álvarez Piñer, en Gijón.
Asimismo, M.S.S. instaló varias de las piezas del ciclomotor sustraído en otro, que resultó ser de la compañera sentimental de su tío. El citado ciclomotor fue recuperado por la Policía cuando era conducido por un amigo del imputado, a quien se lo había prestado y quien desconocía que llevara piezas robadas, al igual que tampoco lo sabía la propietaria del vehículo.
