OVIEDO, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
El sindicato USO reprochó hoy a la dirección de ArcelorMittal que plantee nuevos reajustes en la producción de sus plantas en la mesa de negociación del acuerdo marco que se reunió en Madrid. La dirección de la Unidad Sur de Planos de Europa asistió a la citada reunión con los sindicatos en la que les advirtieron de la paralización de un horno alto de Gijón durante el segundo semestre del año y la posibilidad de expedientes de regulación de empleo en todas las plantas de la división de planos.
Los sindicatos reconocieron la situación difícil que atraviesa la empresa con motivo de la caída de la demanda en el sector del automóvil y la construcción y mostraron su disposición a negociar pero no a renunciar a las reivindicaciones de su plataforma que fue presentada para la negociación del acuerdo marco.
En esta plataforma se incluye una subida salarial de un punto y medio por encima del IPC y una ampliación del plan de prejubilaciones con contrato relevo hasta los trabajadores nacidos en 1952. La empresa rechazó estas medidas y planteó la congelación salarial.
Para el dirigente de USO, José Luis Porto, los representantes de los trabajadores "no niegan ni cierran los ojos a la crisis" pero entienden que "las medidas no se pueden traducir en pérdida de empleo, ni mucho menos en que sean los trabajadores los que se paguen sus propios sueldos con expedientes de regulación".
USO entiende que debe negociarse el acuerdo marco al margen de la situación puntual que atraviese la empresa. "Si luego hay que sentarse a negociar medidas extraordinarias o un ERE lo tendremos que hacer pero ahora estamos hablando de otra cosa porque la empresa no puede supeditar esta negociación a una situación coyuntural", expuso Porto en declaraciones a Europa Press.
Insistió, en este sentido, en que los sindicatos no van a mover "ni un ápice sus reivindicaciones" ante la reunión que tendrán el próximo miércoles. Insistió, no obstante, en que la empresa planteó unas medidas "en un foro inadecuado".
Porto recordó que el próximo día 10 de febrero la Federación Europea del Metal ha convocado una manifestación en Bruselas, en víspera de la presentación de resultados de la empresa en Luxemburgo.
