SANTANDER, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Botín inicia este domingo, 8 de enero, una programación en la que transformará conciertos y exposiciones en "emocionantes" sesiones para niños y mayores. En total, ha organizado cinco sesiones de arte en la sala de exposiciones y otros tantos conciertos de música clásica para disfrutar en familia.
La primera cita, a desarrollar a partir de las doce del mediodía, está relacionada con el "arte y las emociones" a través de la fotografía de Paul Graham y la vida en América y Europa, según ha informado la Fundación en un comunicado.
La programación relacionada con el arte, que se organiza por segundo año consecutivo, precisa inscripción previa a través de la página web de la Fundación (www.fundacionbotin.org). Es gratuita y está destinada a un grupo máximo de doce niños de entre 6 y 12 años. Tendrá lugar en la sala de exposiciones y, en un momento dado, se incorpora la familia.
Las otras cuatro sesiones relacionadas con el arte girarán entorno a la muestra Itinerarios 2010/2011, los domingos 26 de febrero y 4 de marzo; y sobre los dibujos de Murillo, los domingos 29 de abril y 13 de mayo.
Por su parte, las sesiones de música, que se organizan por tercer año consecutivo, serán conducidas por el músico y pedagogo Luciano González Sarmiento. El primer concierto tendrá lugar el domingo 29 de enero, a las 12 horas, con un programa de Schubert ofrecido por el barítono Sebastián Noack y el pianista Manuel Lange.
EDUCACIÓN RESPONSABLE
Esta iniciativa surge dentro del programa 'Educación Responsable', un programa educativo de la Fundación Botín que favorece el desarrollo físico, emocional, social e intelectual de niños y jóvenes, promueve la comunicación y mejora la convivencia escolar a partir del trabajo con docentes, alumnado y familias.
El fin último de este programa es que los niños y adolescentes "se conozcan y confíen en sí mismos, comprendan a los demás, identifiquen y expresen emociones e ideas, desarrollen su capacidad de autocontrol, aprendan a tomar decisiones responsables, valores su salud y mejoren sus habilidades sociales", subraya la entidad.
La evaluación del programa ha constatado que los niños que están recibiendo esta formación en Cantabria "han reducido su ansiedad, han mejorado en la identificación de sus sentimientos y en la reparación de emociones negativas y han ampliado su capacidad de comunicación". Estas variables son, según la Fundación, "esenciales" para evitar que los niños y adolescentes caigan en conductas de riesgo.
El programa se desarrolla en colaboración con la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria.
