SANTANDER, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Palacio de Festivales de Cantabria ha programado para esta semana que viene la obra de teatro 'Oceanía', protagonizada por el actor Carlos Hipólito', y 'El médico, el musical', que llega a Cantabria tras el éxito cosechado en Madrid durante dos temporadas.
'Oceanía' abre el miércoles día 2 la programación de noviembre y conforma la cuarta de las citas del ciclo 'Miércoles íntimos' del Palacio. La obra, dirigida por José Luis Arellano, tiene una duración de 90 minutos y se representará a partir de las 19.30 horas en la Sala Pereda.
'Oceanía' es el testamento artístico y vital de Gerardo Vera, ya que es el último proyecto en el que trabajó antes de que el coronavirus se lo llevara prematuramente.
Como señala su director, la pieza es el recuerdo de una vida "apasionante", el retrato de un país y de una época. "Es la mirada otoñal de un hombre excepcional que un buen día sintió la necesidad de poner negro sobre blanco la historia de su vida. Cientos de páginas en las que plasmó sin pudor una realidad tamizada por el velo del recuerdo: su infancia privilegiada, la dolorosa ruina de su familia, el nacimiento de su eterno amor por el cine, el descubrimiento del amor, el desgarro del desamor, el compromiso político, el odio al padre, la reconciliación a través de la compasión", avanza Arellano.
Ya el viernes 4, sábado 5 y domingo 6 llegará a la Sala Argenta 'El médico, el musical', basado en la novela de Noah Gordon.
Con Ignasi Vidal como director artístico, Iván Macías como compositor y director musical y texto y libreto de Félix Amador, el espectáculo tiene una duración de tres horas, cuenta con más de 30 artistas entre actores y músicos y ha ganado numerosos premios.
Se ambienta en Londres en el siglo XI. La vida del pequeño Rob J. Cole cambia el día que queda huérfano y descubre que posee un don: predecir la muerte. Adoptado como aprendiz por un cirujano barbero,
Rob recorre Inglaterra descubriendo la vida, la disciplina y su curiosidad por aprender. Con 19 años, un médico judío le habla de la lejana Persia, donde existe una escuela de medicina dirigida por el mayor sabio de la época: Avicena.
Rob está dispuesto a cruzar medio mundo para conocerle. Mientras viaja en una caravana a través del desierto conoce a Mary, una chica escocesa que le hará recordar sus orígenes y marcará sus planes de futuro. Nada será fácil para Rob en Ispahan, ni hacerse pasar por judío para que se le permita estudiar ni su relación con el Sha, que se encapricha de su amistad. Pronto se convierte en un alumno aventajado de Avicena, pero una plaga, la guerra y un rey déspota pondrán a prueba la vida de Rob. Solo la amistad, su vocación y el amor le empujarán a sobrevivir.
