SANTANDER 29 Feb. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta de Cantabria y consejera de Empleo y Bienestar Social, Dolores Gorostiaga, afirmó hoy, durante la inauguración del Parque Eólico de Cañoneras en Soba --el primero en la región-- que esta iniciativa constituye un "ejemplo" de "la capacidad innovadora" y la "visión de futuro" de la Comunidad Autónoma.
En la puesta en marcha de la primera fase del parque, que incluye 21 aerogeneradores que suman 17,85 megavatios de potencia y que han supuesto una inversión de 21 millones de euros, Gorostiaga estuvo acompañada del consejero de Industria y Desarrollo Tecnológico, Javier del Olmo y el alcalde de Soba, Julián José Fuentecilla, entre otros.
Gorostiaga subrayó que las regiones y países líderes van a ser, a medio plazo, las que se "alejen" de la economía tradicional y apuesten de manera "prioritaria, determinante y convencida" por las energías renovables, y, de manera muy especial, en zonas de la región como Soba que, según dijo, tiene "excelentes" condiciones para la energía eólica.
En su opinión, la instalación de parques eólicos conlleva "indudables" retornos económicos, de generación de empleo y "fijación" de población en las zonas rurales.
DÍA HISTÓRICO.
Del Olmo, calificó por su parte como "histórico" para Cantabria el día de la inauguración del primer parque eólico y destacó que éste puede generar energía de uso doméstico para unas 17.000 personas. "Con esta realidad", dijo, "el Gobierno de Cantabria se sube al tren de las energías renovables".
El consejero destacó que el parque conlleva "mucho" trabajo en I+D+i, y de "muchas" empresas de la región, hechos que, a su juicio, generan "un alto valor añadido".
El alcalde de Soba expresó su "orgullo" porque una infraestructura de estas características se ubique en su municipio, ya que supone disponer de "energía barata y limpia".
PARQUE EÓLICO.
El proyecto, promovido por 'Eólica 2000 SL', consta de dos fases, que sumarán una inversión conjunta de 37 millones de euros. Estará dotado con 38 aerogeneradores y tiene una previsión de potencia completa de 32,3 megavatios.
Los aerogeneradores son los elementos más espectaculares del complejo, con una torre de 44 metros de altura y palas de 25,3 metros la longitud. Cada unidad tiene una potencia de 850 kilovatios con un diámetro rotor de 52 metros. La torre se apoya en una zapata de 106 toneladas de hormigón estructural y 11 toneladas de armadura de acero.
La infraestructura cuenta, además, con una subestación transformadora y edificio de control, más una línea de alta tensión a 55 Kilovatios, que conecta con la subestación de Ramales de la Victoria, tras más de 12 kilómetros de recorrido. El trazado aéreo, sustentado en 64 puntos de apoyo, se desarrolla por el municipio de Soba, y el soterrado, por el de Ramales de la Victoria.
Con el funcionamiento de esta primera fase, se generan beneficios ambientales como evitar la emisión anual a la atmósfera de 25.365 toneladas de CO2; producir energía equivalente a 3.761 toneladas de petróleo, y abastecer el consumo equivalente de 13.700 hogares.
Cuando se sume la segunda fase, con funcionamiento a pleno rendimiento, las previsiones son evitar emisiones a la atmósfera de 52.326 toneladas de CO2; energía producida equivalente a 7.500 toneladas de petróleo, y abastecer de consumo a lo equivalente de 27.200 hogares de Cantabria.