El buque hospital atiende, desde hace un año, a las flotas de pez espada, del bonito y de la anchoa
SANTANDER, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
El buque hospital Juan de la Cosa partió ayer, a las 20.00 horas, hacia el Atlántico Norte para asistir a la flota pesquera del Norte de España, de la que forman parte alrededor de 960 embarcaciones y 9.600 trabajadores de la mar que faena pez espada, bonito y anchoa, según informaron a Europa Press fuentes del Instituto Social de la Marina.
El Juan de la Cosa tiene como base el puerto de Santander, los barcos a los que asiste proceden principalmente de Galicia (73%), País Vasco (16%), Cantabria (6%) y Asturias (5%).
El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, a través del Instituto Social de la Marina, invirtió 17 millones de euros en su construcción realizada en los astilleros de la empresa IZAR en Gijón.
El buque hospital del Instituto Social de la Marina tiene 75 metros de eslora, 14 metros de manga, siete metros de puntal a cubierta superior y 4 metros de calado medio de trazado.
Está equipado con dos motores principales con una potencia propulsora de 1.710 kw cada uno, dos hélices propulsoras de paso variable y una hélice propulsora de emergencia y maniobra de proa, que le proporcionan un alto grado de maniobrabilidad. Dispone de aparatos electrónicos de navegación y comunicaciones de última generación con capacidad para videoconferencia y telemedicina.
Para su labor de salvamento cuenta con un helipuerto, cuatro lanchas de trabajo y bote de rescate para transporte de enfermos o accidentados y transporte de ayuda médica, así como cinco balsas salvavidas con capacidad para 16 personas cada una. Tiene además capacidad de suministro de combustible, agua dulce, aire comprimido y electricidad a los buques que lo necesiten, así como equipo de buceadores para asistencia logística.
Este hospital en el mar cuenta para desarrollar su labor asistencial y de apoyo logístico con el mejor equipamiento sanitario y los últimos avances técnicos. Toma como base un hospital que ocupa una cubierta completa desde proa, con acceso directo al helipuerto y a la cubierta para facilitar el traslado de enfermos y náufragos a la zona hospitalaria.
Tiene una tripulación de 28 personas y puede acoger hasta 20 personas más (enfermos y náufragos). El equipo sanitario está compuesto por 2 médicos, un ATS/DUE y un mozo sanitario.
La zona hospitalaria está dotada de quirófano, laboratorio, sala de curas, unidad de cuidados intensivos, sala de exploraciones radiográficas y sala de aislamiento para el tratamiento de quemados, infecciosos y enfermos psiquiátricos. Dispone de instalación centralizada de gases medicinales (oxígeno y aire medicinal), equipo de radiología con estación de diagnóstico y estación de trabajo que permite la transmisión de imágenes radiológicas de alta velocidad a través de videoconferencia.
La seguridad está presente en todo su diseño, tanto en lo que se refiere a amplitud de camarotes, disposición de camas o sistemas de compartimentos, como en los dispositivos de puesta a flote y recuperación de lanchas salvavidas, una operación clave tanto en la salida urgente de los médicos para atender a los enfermos a bordo de sus propios buques, como para subir a éstos al buque hospital.
