El director del ICAM aboga por "no eliminar del todo" los mecanismos de intervención y crear un "stock de seguridad"
SANTANDER, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -
El director del Instituto de Cuestiones Agrarias y Medioambientales (ICAM), Daniel Pérez, cree que la Presidencia española de la Unión Europea (UE) --en el primer semestre de 2010-- será un "momento clave" y una "oportunidad "única" para "influir" en el futuro de la PAC después de 2013.
En su opinión, en la negociación de la PAC --que comenzará a debatirse el próximo año-- España debe "tener claro" que se necesita una política agraria "fuerte", "estable" y que esté dotada de "presupuesto suficiente", aspectos que nuestro país debe defender, según dijo.
Lo contrario a esos principios iría en "detrimento" de las explotaciones agrícolas españolas, advirtió. Así lo aseguró hoy en Santander, donde Pérez dirige, junto al presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos, Baldomero Segura, el encuentro 'Seguridad alimentaria. La agricultura después de la Política Agraria Común', en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
Tras vaticinar que las negociaciones de la PAC van a ser "durísimas", el director del ICAM señaló que España debe contribuir a asegurar una producción alimentaria "de calidad", así como su distribución y abastecimiento a la población y, también, que el continente europeo sea "autosuficiente".
Asimismo, apostó por que haya fondos adicionales para determinadas partidas --especialmente dentro del eje relacionado con el desarrollo rural-- para ayudar a zonas desfavorecidas y con dificultades para cultivar productos o fijar población, o para combatir los problemas derivados de las sequías, entre otros.
A este respecto, Segura añadió que se han pedido "más objetivos" a la PAC, pero no se han dotado con "más recursos" por lo que, a su juicio, el resultado final ha sido "bastante poco satisfactorio".
El presidente de los ingenieros agrónomos también opinó que España tiene que definir el modelo de agricultura que quiere alcanzar para defender después esa postura en la UE.
"STOCK DE SEGURIDAD"
El director del ICAM también abogó por "no eliminar del todo" los mecanismos de intervención y crear un "stock de seguridad" que garantice la calidad de los alimentos y el abastecimiento a la población ante catástrofes naturales o cuando las cosechas no están "al nivel" de la demanda.
En este sentido, --y tras apuntar que la pérdida de cosechas y las catástrofes naturales derivan del cambio climático--, Pérez indicó que estos hechos repercuten en el precio de los alimentos y, por tanto, en nuestros "bolsillos".
Sobre esta cuestión también se pronunció Segura. En concreto, manifestó que no cree que el cambio climático "ponga en riesgo" el abastecimiento de alimentos a la humanidad, aunque sí variará los productos que se cultivan en las distintas zonas.
En cualquier caso, reconoció que si bien no hay problemas para asegurar la cantidad de alimentos, el hambre afecta en la actualidad a una quinta parte de la población mundial.
TRANSGÉNICOS
Por otro lado, el director del ICAM se mostró partidario del uso de transgénicos, que se aceptan en Estados Unidos y otras partes del mundo mientras los estados miembros están en desventaja. "Es absurdo que la Unión Europea no siga ese camino", comentó, para recordar que si bien la UE no los puede "producir", sí los puede "importar".
"No se puede permitir que en Estados Unidos y en muchas partes del mundo se estén adoptando y que en la Unión Europea seamos más papistas que el Papa y los tengamos prohibidos", manifestó.
A su juicio, los transgénicos y la biotecnología pueden ser "un camino y una herramienta más" para generar los productos necesarios para alimentar al conjunto de la humanidad.
Aún así, reconoció que no van a ser "el salvador" y no van a hacer que "se acabe el hambre en el mundo", pero sí van a contribuir a paliar problemas medioambientales.
