Tribunales.- Tres meses de prisión para un conductor ebrio que atropelló a un guardia civil que atendía un accidente

SANTANDER 22 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Juzgado de lo Penal número 2 de Santander ha condenado a tres meses de prisión a un conductor ebrio que atropelló a un agente de la Guardia Civil que estaba atendiendo un accidente en la Autovía del Cantábrico, a la altura de Colindres. Además, al procesado, David G.G., le será retirado el carné de conducir por el plazo de un año y un día.

Según se explica en la sentencia, los hechos ocurrieron sobre las seis y media de la mañana del 23 de octubre del año 2005 en el punto kilométrico 173,400 de la A-8. El acusado, circulaba por la autovía afectado por un "consumo excesivo" previo de bebidas alcohólicas y, además, "a velocidad elevada".

Por ello, no se dio cuenta a tiempo de las señales luminosas de precaución que le realizaba una agente policial que se encontraba en el lugar por otro accidente de circulación.

Al "percatarse repentinamente de peligro" por la presencia de los vehículos accidentados, el conductor frenó "bruscamente" y perdió el control de su coche, de forma que chocó contra las vallas de protección de la autovía, atropelló después a un agente de la Guardia Civil que estaba atendiendo el accidente previo y terminó chocando con un vehículo policial.

Como consecuencia del atropello, el agente herido, de 51 años, tuvo que permanecer nueve días ingresado y estuvo 200 días de baja, ya que sufrió diferentes contusiones y necesitó intervención quirúrgica, rehabilitación y medicación, entre otros tratamientos. Además, le han quedado algunas secuelas.

En cuanto a las vallas de protección de la autovía, sufrieron daños valorados en 306,48. Los perjudicados han sido indemnizados ya por el seguro.

Tras el accidente, el acusado fue sometido a la prueba de la alcoholemia y dio un resultado de 0,52 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. Posteriormente, en la prueba en sangre, se encontró un gramo de alcohol etílico por litro de sangre.

El Juzgado le condena a tres meses de cárcel por un delito contra la seguridad del tráfico y otro de lesiones imprudentes, aplicándole la atenuante de dilaciones indebidas.