El sindicato cree que el incremento medio de más de un 10% de las horas de la ratio diaria "aliviará una sobrecarga de trabajo inaceptable"
SANTANDER, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
El sindicato UGT ha defendido que la nueva normativa para la dependencia aprobada este jueves en Consejo de Gobierno supone "un avance real" en la calidad del servicio y en las condiciones laborales de los trabajadores del sector y, por tanto, "no sería deseable que no saliera adelante".
En este sentido, señala las mejoras que implicaría la normativa con el aumento de la ratio de las horas diarias de atención directa según el grado de dependencia, que en el caso de las residencias de 24 horas de mayores horas se incrementaría entre un 10 por ciento en los trabajadores con titulación universitaria y un 13 por ciento en los técnicos.
Para el sindicato, "siendo una normativa susceptible de mejora", supone "un avance significativo" para la calidad de la atención a las personas dependientes y para las condiciones laborales de los trabajadores, defiende en nota de prensa.
Recuerda al respecto que estos trabajadores "fueron las primeras víctimas de los recortes que se hicieron en las ratios de atención diaria en 2012", porque "pasaron a sufrir una sobrecarga de trabajo que ahora se aliviará con este incremento en la atención y, subsiguientemente, con la contratación de más personal para cubrirla".
En este sentido, UGT destaca que esos ratios de horas de atención diaria a los dependientes en todas las plazas concertadas, que se distribuyen según el grado de los tres establecidos en la dependencia, implicará, en el caso de los técnicos, que son la gran mayoría de la plantilla del sector, un aumento medio de un 13% (entre 14 y 17 horas diarias) en las residencias de 24 horas; y de entre 10 y 20 horas en los centros de día de mayores (estaba en 88 horas y pasa a 108 horas en el grado III, 98 en el II y se mantiene como estaba en el I).
"Es lógico que estemos de acuerdo con estos incrementos de horas de atención y de nuevas contrataciones para llevarlo a cabo porque, se quiera o no, los recortes de 2012 recayeron directamente en el sobreesfuerzo de los trabajadores, en su profesionalidad y, por desgracia, en su propia salud laboral", subraya UGT.
"ESCASA ACTITUD NEGOCIADORA" DE LA PATRONAL
Por otro lado, el sindicato critica que la patronal del sector mantuviera en la época de los recortes de 2012 "un silencio más que sospechoso" y ahora responda "con las más duras críticas" a la nueva normativa, que para UGT "se ha demorado en su tramitación, entre otros motivos, por su escasa actitud negociadora durante más de dos años de conversaciones con los sindicatos y la Administración".
Por ello, ha instado a los distintos grupos políticos del Parlamento de Cantabria a mantener esta normativa porque, según dice, "no podemos entrar en 2019 con la normativa de 2012 y volver a situaciones propias de una época de crisis económica y de recortes".
