TOLEDO, 19 Ene. (EUROPA PRESS)
El consejero de Bienestar Social, Tomás Mañas, afirmó hoy que serán entre 800 y 1.000 las personas dependientes en Toledo, del total de 10.000 que existen en la región, las que se beneficiarán de la aplicación de la Ley de Dependencia en este año 2015, cifra que deberán establecer los equipos de valoración que empezarán a funcionar este mes de enero.
"La Fundación del BBVA ha hecho un estudio en el cual incrementa este número, pero nosotros evidentemente nos tenemos que basar ahora mismo en los datos que ha puesto a disposición de todas las comunidades autónomas el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales", declaró Mañas a preguntas de los medios en rueda de prensa.
De esta forma, las personas dependientes serán aquellas que los equipos de valoración, que empezarán a funcionar este mes de febrero, "valoren el grado de dependencia de cada uno de ellos y será a esas personas a las que tendremos que atender según el catálogo de servicios", puntualizó.
La aplicación de la Ley será escalonada, por lo que en primer lugar se atenderán a los grandes dependientes que son los que necesitan el apoyo de otra persona para realizar casi la totalidad de las tareas cotidianas.
En Castilla-La Mancha hay actualmente unos 10.000 dependientes, de los que 3.100 son atendidos en centros y residencias en Toledo, siendo entre 2.500 y 2.600 de ellos grandes dependientes. Así, son atendidos en sus casas entre 800 y 1.000 personas.
Según explicó el consejero, estas cifras se calculan con los datos que aportan los trabajadores sociales, que valoran a las personas mayores, y una lista de espera para entrar en residencias en las que están inscritas personas que se sabe que están atendidas por sus familias.
Asimismo, en el año 2015 ,según el Libro Blanco del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, esta ley en Castilla-La Mancha debería de atender entre 60.000 y 70.000 personas en los distintos grados de dependencia.
