CUENCA, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
El subdelegado del gobierno en Cuenca, Julio Magdalena, aseguró hoy que lo que va de año en la provincia se han dictado 326 órdenes de alejamiento, la cifra más baja de toda Castilla-La Mancha, y se han realizado casi 250 denuncias por violencia de género.
Así lo indicó en declaraciones a los medios el subdelegado, quien recordó que el Gobierno tiene previsto desarrollar tecnología telemática para hacer más efectivo el cumplimiento de las órdenes de alejamiento.
Señaló también que hasta la actualidad alrededor de 40 mujeres de Cuenca disponen de un teléfono GPS para contactar directamente con las fuerzas de seguridad, y avanzó que se van a destinar cinco millones de euros para diseñar dispositivos que permitan tener localizados a los maltratadores denunciados o recién excarcelados.
El subdelegado realizó estas declaraciones tras leer un manifiesto contra la violencia de género, aprobado por el Consejo de Ministros. En él incidió en la necesidad de ocuparse de "los menores que viven expuestos a la violencia ejercida en el hogar en el que viven".
El manifiesto también apunta que "la población extranjera en España representa el 11,3% del total de población residente en el país. Sin embargo, la proporción de mujeres inmigrantes extranjeras en España, al igual que el de agresores, supone una sobrerepresentación respecto al peso demográfico de hombres y mujeres extranjeros".
Sobre este extremo, el subdelegado apuntó que "no existe una razón de peso que determine que unos colectivos por origen, religión, clase social, nivel formativo o cualquier otro factor sufran mayor incidencia en la violencia hacia las mujeres", pero sí que añadió que "una de las causas que dificulta habitualmente las denuncias es la dependencia económica del cónyuge".
En el resto de la capital conquense se vivieron diversos actos de solidaridad y denuncia: la Semana Internacional de Cine de Cuenca "Mujeres en Dirección" realizó una concentración a la una y media en la puerta del Teatro Auditorio, y varios edificios oficiales lucen lazos solidarios con este motivo.
Uno de ellos, el Ayuntamiento, que convocó su concentración a mediodía, con una suelta de globos y la lectura de un manifiesto. El alcalde, Francisco Pulido, apostó por la educación para combatir esta lacra "porque no es un problema de fácil solución. La educación debe partir de la enseñanza más elemental y conseguir que nuestros niños y niñas pierdan esa idea de superioridad de unos sobre otros", dijo.