TOLEDO, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
El jurado popular consideró hoy a J.R.G., de 34 años, culpable, por unanimidad, de un delito de homicidio, con la agravante de parentesco y las atenuantes de arrebato y colaboración de la justicia, por matar a su hermano J.A.R.G., mayor que él, de varias puñaladas, en octubre de 2005, en el domicilio paterno en el que ambos vivían en Madridejos (Toledo).
Tras varias horas de deliberación y tres días de vista oral, el juicio quedó visto para sentencia después de que el jurado popular emitiera su veredicto, tras el cual se interrumpió la sesión a solicitud suya para fotografiarse con las partes en la sala de audiencia.
El Ministerio Fiscal, que pedía 14 años de prisión para el acusado, rebajó su petición de pena a 13 años, mientras que la defensa pidió que se redujese la pena a entre 5 y 10 años, además de solicitar la posibilidad de que el imputado se acoja a los beneficios del indulto, cuando sea pertinente.
Los hechos juzgados ocurrieron antes de las 18.00 horas del día 26 de octubre de ese año, cuando el acusado, que vivía en la misma casa junto a su hermano y su padre, se encontraba en su habitación durmiendo la siesta, lo que aprovechó su hermano para entrar en el cuarto y sustraerle dinero de los bolsillos del pantalón que se encontraba encima de una silla, siendo sorprendido por el acusado.
Los dos hermanos tenían unas relaciones buenas, a pesar de lo cual, las discusiones eran frecuentes, motivadas por las reiteradas sustracciones de dinero que la víctima hacia a su hermano, lo que motivó incluso que este último pusiera un cerrojo en la puerta de la habitación de su dormitorio.
En aquel momento, ambos hermanos iniciaron una nueva discusión, en el curso de la cual la víctima exhibía el dinero sustraído en la mano y mientras se reía y el acusado trataba de recuperarlo cogió una funda de cuero que tenía en la habitación y sacó de ella un cuchillo tipo puñal de 34 centímetros de largo con una hoja de 20 centímetros y, con el propósito de quitarle la vida a su hermano, lanzó una cuchillada contra el cuerpo de la víctima.
Esta puñalada le alcanzó el antebrazo y le atravesó de lado a lado, ocasionándole una herida inciso punzante, pero le propinó una segunda puñalada en el pecho que le atravesó el pulmón izquierdo y le ocasionó la muerte por sección del tronco de la arteria pulmonar tras breves instantes, de la que el fallecido no pudo defenderle, cayendo muerto al pie de la escalera que le llevaba a la puerta de la calle.
El acusado lavó el puñal, lo guardó en la funda y lo escondió en la leñera de la casa, negando en principio los hechos ante la Comisión Judicial para posteriormente reconocerlos, conduciendo a los agentes hasta el lugar en el que había escondido el arma, que pudo ser recuperada.
Tanto el padre como otras dos hermanas del acusado han renunciado a la indemnización que pudiera corresponderles. El imputado es consumidor de sustancias estupefacientes pero no tiene antecedentes psiquiátricos ni presenta ningún factor que modifique el conocimiento y control de sus actos, poseyendo una inteligencia suficiente para conocer el sentido del bien y el mal.
Durante las tres jornadas que durará la vista con jurado, los días 25, 26 y 27 de marzo, está previsto que pasen por la Audiencia Provincial cinco testigos y 15 peritos.