VALLADOLID 19 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Agricultura y Ganadería comunicó hoy al Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León una inversión por valor de 790.000 euros para la construcción de un "moderno" invernadero biotecnológico al servicio de las diversas líneas de investigación que actualmente desarrolla el Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl).
El nuevo invernadero ocupará una superficie aproximada de 470 metros cuadrados de la finca de Zamadueñas, ubicada en el kilómetro 119 de la carretera de Burgos a su paso por la provincia de Valladolid. Además, estará compartimentado en diez cabinas independientes, ocho cabinas con grado de confinamiento tipo 2 de unos 20 metros cuadrados y dos cabinas para ensayos de plantas de unos 90 metros cuadrados.
La inversión para la construcción de este nuevo invernadero, cuyas instalaciones deberán estar entregadas en el plazo de ocho meses contados desde la adjudicación del contrato, estará financiada en un 70 por ciento por los recursos que el Feder tiene asignados al Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria del Ministerio de Educación y Ciencia en el Programa Operativo Integrado FEDER-FSE de Investigación, Desarrollo e Innovación de Objetivo 1.
Además, la contratación incluye el suministro y la instalación de todos los equipos del invernadero y la comprobación de su correcto funcionamiento con la verificación del cumplimiento de las especificaciones técnicas de todos los equipos.
Según explicó el portavoz de la Junta y consejero de la Presidencia, José Antonio de Santiago-Juárez, la puesta en marcha de esta "novedosa" dependencia para la investigación viene determinada por la normativa europea que exige que las instalaciones en las que se trabaje con organismos biológicos, incluyendo los modificados genéticamente, se ajusten a parámetros constructivos y de seguridad que garanticen la conservación y mejora del medio ambiente y la protección de la salud humana, lo que implica la adaptación de aquéllas en las que se viene trabajando con dichos organismos o el diseño de nuevas instalaciones si la adaptación no es posible.
Las líneas de investigación en las que trabaja el Itacyl necesitan contar con unas instalaciones de invernadero que cumplan estos requerimientos comunitarios y el grado de confinamiento exigido por la normativa reguladora de la utilización de los organismos modificados genéticamente. La dotación actual del Itacyl no cumple de forma suficiente los requisitos comunitarios.
Ocuparán las nuevas instalaciones las dos líneas de investigación del departamento de producción vegetal y agronomía referidas al grupo de mejora genética de cereales y al grupo de mejora genética de proteaginosas, la línea de mejora genética de las judías y el grupo de cultivo de la fresa que investiga el departamento de hortofruticultura, las investigaciones en el campo de la entomología y de la patología de la vid que está llevando a cabo el departamento de protección vegetal y finalmente, las investigaciones del laboratorio agroalimentario de I+D adscrito al laboratorio de biotecnología, centradas en el uso de plantas transgénicas.