SALAMANCA, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional ha detenido a un hombre de 40 años por amenazas graves, algunas de ellas de muerte, a sanitarios en un centro de salud, para que le dieran una medicación que no le correspondía, así como, posteriormente, a trabajadores de un establecimiento comercial, donde pidió dinero y comida, y a los agentes que acudieron al local tras ser alertados.
Los hechos ocurrieron el 13 de enero, cuando el varón, con "más de 30" detenciones previas, entre ellas una el día antes por hechos "similares", accedió al establecimiento y exigió comida y dinero, ante lo que, al no conseguir su propósito, empezó a mostrar una actitud "muy agresiva y amenazante" con los empleados.
Al llegar, los agentes consiguieron que el hombre saliese pero, una vez en la calle, el posteriormente detenido invadió el asfalto, "poniendo en riesgo la seguridad vial", se acercó al coche y empezó a amenazar "de muerte" a los policías.
Tras realizar varias gesiones, los agentes comprobaron que el mismo autor de los hechos había causado, en esa misma mañana de su detención, "problemas" en un centro de salud de la ciudad, donde había accedido a uno de los despachos y había exigido a los facultativos que le dispensaran una medicación, la cual éstos se negaron pues "no le correspondía", por lo que el hombre comenzó a "dar voces y amenazarlos verbalmente".
Después de estos hechos, la dotación policial detuvo al individuo, que ofreció "fuerte resistencia" y mantuvo una actitud "violenta y agresiva" tanto en ese momento como en su traslado a dependencias policiales y durante su estancia en la comisaría.