Marcos traslada a las confederaciones hidrográficas sus aportaciones para el próximo Pacto Nacional del Agua
VALLADOLID, 17 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Castilla y León considera necesarios 800 hectómetros cúbicos más de capacidad de agua en la Comunidad para atender los nuevos regadíos planificados y tener almacenamiento suficiente para soportar años con problemas de sequía como el actual y hará un estudio para ver en qué lugares se pueden hacer nuevas regulaciones.
Así lo ha afirmado la consejera de Agricultura y Ganadería y portavoz de la Junta, Milagros Marcos, tras una reunión con los presidentes de las cuatro confederaciones hidrográficas con presencia en la Comunidad --Ebro, Duero, Tajo y Miño-Sil-- para trasladar las necesidades de Castilla y León y sus aportaciones de cara al próximo Pacto Nacional del Agua, algo que considera necesario y una apuesta política "muy valiente".
En este contexto, la consejera ha señalado que es necesario que España sea sostenible en términos agroalimentarios y medioambientales, algo que debe ser compatible con el desarrollo rural, la agricultura y la agroalimentación, todo ello en línea con el trabajo que se desarrolla para luchar contra la dspoblación.
Así, se ha llevado a cabo un análisis de la situación del regadío y la capacidad de regulación (actualmente cifrada en 3.800 hectómetros cúbicos) que hay en Castilla y León, que concluye la necesidad de 350 hectómetros cúbicos más para atender las 660.000 hectáreas de regadío con las que se espera contar en 2027.
Además, considera que sería necesario llegar a los 800 hectómetros para atender las necesidades de recarga de los acuíferos y abastecimiento de agua, para lo que ya se trabaja con el impulso de la constitución de comunidades de regantes, para lo que la Junta también reclama un procedimiento ágil y rápido.
Milagros Marcos ha recordado que la capacidad de riego, teniendo en cuenta la modernización que se lleva a cabo en el marco de planificación hasta 2020-2021, se prevé de 550.000 hectáreas.