La ULE edita un libro de María Antonia Melcón sobre cómo aprender a envejecer

Europa Press Castilla y León
Actualizado: martes, 13 febrero 2007 15:34

LEON 13 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Secretariado de Publicaciones de la Universidad de León (ULE) editó el libro 'Envejecimiento y Educación' que recoge el trabajo desarrollado por la profesora María Antonia Melcón Álvarez, Subdirectora del Departamento de Filosofía y Ciencias de la Educación, realizado con el objetivo de "ofrecer un mensaje esperanzador para todos los que vamos envejeciendo y nos adentramos en esa etapa de mayor madurez".

El mensaje, según reconoce la profesora en un comunicado recogido por Europa Press, no es otro que "a envejecer también se aprende".

La autora consideró que el envejecimiento no es un proceso homogéneo que afecta a todas las personas por igual, sino que "hay tantas formas de envejecimiento como personas que envejecen".

En su primer capítulo la obra realiza una presentación conceptual del envejecimiento y la vejez, y expone los criterios definitorios de cuándo se considera una persona mayor. A este respecto se señala que "desde el punto de vista legal, la persona comienza a considerarse mayor desde el momento de la jubilación que se situaba normalmente a los 65 años", aunque lo cierto es que se puede afirmar que la vejez ha comenzado de verdad cuando asoma el cansancio de la vida, desencanto, pesimismo, cuando se mira al pasado con nostalgia, se lamenta el presente y se teme el futuro.

En opinión de María Antonia Melcón, "es conveniente tener claramente diferenciadas" la edad biológica y la cronológica, ya que hay individuos 'bien conservados' y adultos jóvenes que parecen 'prematuramente envejecidos'. También ha de ser considerado el 'criterio social' que resulta relativo, sumamente variable y dependiente del marco circunstancial. Todo ello lleva a concluir que "ser" viejo, "sentirse" viejo, "parecer" viejo, "vivir como" o "ser considerado" viejo son también hechos distintos.

Tras dedicar varios capítulos al análisis de los fundamentos biológicos del envejecimiento, los cambios psicológicos, el lenguaje y comunicación, los aspectos psicosociales y la evaluación psicológica, el libro también se detiene en el estudio de la importancia de la intervención psicológica preventiva, ya que las últimas investigaciones están confirmando que "el comportamiento y las vivencias de la vejez sólo están parcialmente determinados por los factores biológicos, mientras que están ampliamente fijados por los factores ambientales (sociales y ecológicos)".

Por ello, según la autora, las medidas preventivas deben comprender acciones que además de actuar sobre el entorno social de las personas mayores, también estimulen, reactiven y entrenen actitudes físicas y psicológicas, al tiempo que favorezcan la participación de contactos sociales que puedan frenar el proceso de deterioro.

En el apartado de conclusiones, María Antonia Melcón explicó que la sociedad ha creado numerosos estereotipos sociales, mitos y falsas creencias sobre el envejecimiento. "Parece que hemos asumido, - apuntó-, que el envejecimiento va asociado a un estigma negativo que carece de base científica".

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