Estudio de previsiones económicas de Castilla y León. - UNICAJA
VALLADOLID 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las previsiones realizadas por la sociedad de estudios del Grupo Unicaja apuntan a que el PIB regional podría crecer un 2,5 por ciento en el conjunto de 2025, por debajo de la media estatal (2,8 por ciento), pero 0,3 puntos más que lo estimado hace seis meses; mientras que para 2026 se prevé un incremento del 1,8 por ciento --una décima más que lo valorado en el último informe--.
Unicaja ha publicado el número 36 de su informe 'Previsiones Económicas de Castilla y León', que, como en ediciones anteriores, ha sido elaborado por la sociedad de estudios del Grupo Unicaja.
El documento estima el crecimiento económico de la comunidad para el conjunto de 2025 en un 2,5 por ciento, más que lo estimado hace seis meses (2,2 por ciento), "al registrarse un comportamiento algo mejor de lo previsto en la primera mitad del año".
Este crecimiento se apoyaría principalmente en la demanda interna, sobre todo en el consumo privado, dada la trayectoria positiva del empleo.
Aun así, el dato está un punto por debajo del crecimiento experimentado en 2024, cuando el PIB autonómico subió un 3,5 por ciento, según las previsiones realizadas por la sociedad de estudios del Grupo Unicaja.
En cuanto a la previsión para el próximo ejercicio, consideran que la tasa de crecimiento podría moderarse hasta el 1,8 por ciento, muy similar a la estimada seis meses atrás (1,7 por ciento) y cercana a la prevista para el conjunto de España (1,9%). Prevén que el crecimiento "se ralentice en los próximos trimestres, en un contexto marcado por las tensiones comerciales, que continúan siendo una de las principales fuentes de riesgo para el crecimiento".
Por su parte, en cuanto al mercado de trabajo, el empleo ha mostrado, según el estudio, una trayectoria "muy favorable", al intensificar el crecimiento en el segundo trimestre de 2025, según la Encuesta de Población Activa (EPA).
Sin embargo, señalan que en julio y agosto el aumento en la cifra de trabajadores afiliados a la Seguridad Social se ha moderado levemente, creciendo en torno a un 1,4%, por debajo de la media española. Según la EPA, el número de ocupados en el segundo trimestre aumentó en torno a 14.300 con relación al trimestre anterior, fundamentalmente por el crecimiento en los servicios y, en menor medida, en la construcción.
En términos interanuales, el empleo creció un 3,5% (2,7% en España), con un incremento generalizado por sectores, a excepción del sector agrario. Por su parte, la cifra de parados disminuyó un 12,1%, pese al incremento de la población activa (principalmente extranjera), situándose la tasa de paro en el 8,5% (10,3% en España).
Se estima que, en el promedio de 2025, el número de ocupados crezca un 2,5%, por el aumento en la industria y, principalmente, en los servicios. Asimismo, la cifra de parados seguiría a la baja, aunque a menor ritmo, dado el incremento de la población activa, lo que situaría la tasa de paro en el 8,4% (un punto inferior a la del año anterior).
Para 2026, se prevé un aumento del empleo del 0,9% y una tasa de paro del 8,2% en el promedio del año (en torno al 10% en España).
Por provincias, el informe sitúa a Salamanca (3,4%) y Valladolid (3,3%) con las tasas de crecimiento más elevadas. También habrían crecido por encima de la media regional Segovia (3,2%) y Burgos (3,2%).
Para el conjunto de 2025, las previsiones de Analistas Económicos de señalan que las tasas de crecimiento podrían oscilar entre el 1,6% de Soria y el 3,1% de Salamanca, mientras que sitúan un crecimiento por encima de la media regional en Segovia (3%), Valladolid (2,8%) y Burgos (2,7%).