BARCELONA, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Barcelona ha vuelto a enviar inspectores al Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de la Zona Franca este miércoles, ha explicado el teniente de alcalde Jaume Asens en la comisión de Presidencia, Derechos de Ciudadanía, Participación, Seguridad y Prevención.
"Este miércoles los hemos vuelto a enviar y esperamos que les dejen hacer su trabajo", ha aseverado Asens en un debate solicitado por el PP, después de que la policía del CIE impidiera el acceso de dos inspectores y de una letrada el lunes.
La concejal popular Àngels Esteller ha pedido información sobre los equipamientos públicos que no cuentan con licencia de actividad municipal o están exentos de su obtención, datos que Asens no ha facilitado, tras lo que Esteller ha asegurado que existen equipamientos que no necesitan licencia de actividad, entre ellos el CIE, porque se presta un servicio policial de carácter público y están exentos, según ella.
Ha dicho que la orden de cierre del centro por parte del Ayuntamiento por no contar con la licencia adecuada ni las medidas de seguridad requeridas es en realidad una "intromisión" y una lucha política contra el Estado, a lo que Asens ha respondido que podrían haber pedido la licencia --dieron un plazo de un mes para hacerlo-- y ha pedido buscar una solución civilizada entre todos, en sus palabras.
El portavoz de CiU, Joaquim Forn, ha dicho que es "una cuestión de cajón" que no se pueda operar sin licencia de actividad, y ha reiterado su apoyo al Gobierno de Ada Colau en las gestiones para cerrar el CIE, ya que defiende tanto su cierre como el del resto de este tipo de centros.
La republicana Trini Capdevila ha respondido a Esteller que las intromisiones son desde el Estado hacia Catalunya, porque está "en contra de todas las decisiones que toma", y ha criticado que la reapertura del centro el mismo día en que se anunció la orden de actividad representa una actuación más propia de un Estado totalitario, con argumentos del siglo XIX.
Josep Garganté (CUP) ha sostenido que el ministro del Interior, Jorge Fernández, reabrió el centro el mismo día para demostrar que manda él, aunque está convencido de que el CIE cerrará --por la lucha en la calle y no por su fe en el Gobierno municipal, porque son ateos, ha dicho--, y ha asegurado que la desaparición del CIE y de la monarquía "van ligados a la misma cadena de opresión".
El portavoz de C's, Paco Sierra, ha tachado de esperpento lo que ha descrito como una pelea con el Estado por parte de un ejecutivo municipal que considera que están constantemente desafiándolo y buscando "mantener un pulso" con el Gobierno central.