BARCELONA, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -
El líder del PP catalán criticó hoy al portavoz del PSC, Miquel Iceta, por la "estrategia de condicionar la que pueda ser decisión de los tribunales", en referencia al proceso que se sigue en el Constitucional contra el Estatut.
El portavoz parlamentario del PSC ha apostado por reformar la Carta Magna si el Constitucional no avala el Estatut, dejando así clara la intención de su partido de llegar hasta el final en la defensa del texto.
"Me parece de una profunda irresponsabilidad y más viniendo de un partido de gobierno como el socialista y de un señor que tiene responsabilidades políticas muy importantes dentro del partido", afirmó Piqué.
Piqué pidió que se deje al Constitucional "hacer su trabajo, que dicte su sentencia y acatarla con respeto, serenidad y rigor", porque "intentar presuponer, predeterminar o condicionar la decisión del TC es un cosa no muy coherente con los principios de un Estado de derecho y particularmente de la división de poderes".
IBARRA Y BARRERA, "ANTIANDALUCES".
El presidente del PP catalán se refirió al Estatuto andaluz para decir que "ahora que parece que la Junta de Castilla-La Mancha está pensando", igual que la de Extremadura, en presentar un recurso de inconstitucionalidad, "me gustaría que todos aquellos que han dicho que presentar un recurso contra el Estatut de Catalunya es anticatalán digan que el señor Rodríguez Ibarra y el señor Barrera son antiandaluces". "A ver si se atreven", añadió.
Piqué aclaró que considera que ambos gobiernos autonómicos están en su derecho de presentar el recurso, pero que "causa estupor político" que "cuando lo hace el PP es un recurso en contra de los catalanes y de Catalunya, pero cuando lo hace el señor Rodríguez Ibarra o el señor Barrera, siendo los dos socialistas, nadie les acusa de antiandaluces".
CIEN DÍAS DE GOBIERNO MONTILLA.
Respecto a los cien primeros días del gobierno del presidente de la Generalitat, José Montilla, Piqué dijo que "en la práctica hay bastante continuidad", pero que "sí que hay una diferencia: la voluntad de no generar el ruido que generaba el primer tripartito".
Según Piqué "el exceso de prudencia está llevando a la inacción", porque, "como no se quieren generar los problemas que generaba el primer tripartito, lo que se hace es no tomar decisiones y todo aquello que es divisorio dentro del mismo tripartito se aparca".
De este modo, según Piqué, "se buscan constantemente equilibrios con un nuevo elemento de confrontación que no existía antes que es el conflicto permanente de competencias con el Gobierno español".
