Quiere ser "prudente" sobre la declaración de Puigdemont en Sassari (Italia)
BARCELONA, 4 Oct. (EUROPA PRESS
El presidente del PP catalán, Alejandro Fernández, ha calificado de éxito la Convención del PP que finalizó este domingo en Valencia, y la ve como el "preludio" de un futuro Gobierno del líder de los populares, Pablo Casado.
En rueda de prensa este lunes, ha sostenido que durante la Convención notó un ambiente optimista y de victoria, "que no se veía desde las victorias electorales de Aznar y Rajoy", y considera que se debe a que el PP ha sido capaz de trasladar la idea de un proyecto alternativo al del Gobierno actual de Pedro Sánchez, según él.
Además, ha manifestado la necesidad de aglutinar el voto del centroderecha liberal en torno al PP porque "cuando ese espacio ha aparecido dividido, el PP y el centroderecha han ido a la oposición, pero cuando ha ido unido el PP ha podido gobernar y ha sacado a España de la crisis".
Preguntado por qué opinión le merece la declaración del expresidente Carles Puigdemont este lunes ante el tribunal de Sassari (Italia), Fernández ha señalado que quiere ser "prudente sobre lo que se tiene que afirmar sobre Puigdemont hasta que no se tome una decisión definitiva".
Sobre las declaraciones del abogado de Puigdemont, Gonzalo Boye, de que llevará al Tribunal de Apelación de Sassari las declaraciones de Casado durante la Convencion del PP de traer a España a Puigdemont, ha replicado que un "señor que tiene condenas por secuestrar a seres humanos no está en disposición de dar lecciones de ética a nadie", en referencia a Boye, y las tacha de simple mensaje propagandístico.
Con respecto al Debate de Política General en el Parlament de la semana pasada, Fernández ha considerado que se vio un Govern "absolutamente destruido por sus discusiones internas, que han heredado de etapas previas pero que no han sabido superar", así como la degradación del debate público, en sus palabras.
"Cualquier movimiento de Puigdemont acaba alterando el día a día de la política catalana y la calidad de las propuestas que se debaten. Además, vemos a un Govern prisionero de la extrema izquierda ideológica de la CUP, y esto tiene consecuencias: la destrucción de la calidad de vida y del prestigio de las instituciones", ha añadido.