BARCELONA, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
Foment del Treball ha considerado los 7.000 millones de euros en ayudas directas a pymes y autónomos aprobados este viernes por el Gobierno un avance "insuficiente" para paliar la falta de liquidez del tejido empresarial derivada de la pandemia del Covid-19.
La patronal catalana ha insistido en incrementar hasta 50.000
millones las ayudas directas con el objetivo de alcanzar un nivel
similar de apoyo a los principales países europeos y ha alertado que,
si se retrasa más la determinación de aumentar el gasto público se
"acentuarán las secuelas de la crisis", según un comunicado.
De los 7.000 millones, 2.000 se destinarán a Baleares y
Canarias y 5.000 a la Península Ibérica, algo que Foment también ha
tachado de "insuficiente", y ha propuesto que sean los sectores y las empresas más afectadas las beneficiarias de las ayudas directas.
CAÍDA DEL 30% DE LA FACTURACIÓN
El fondo de 7.000 millones son ayudas directas que se podrán destinar al pago de deuda contraída desde marzo de 2020, tanto la relacionada con proveedores, como al pago de gastos fijos, suministros, salarios, arrendamientos o reducción de la deuda financiera o no financiera, siempre que la caída de la facturación sea al menos un 30% respecto a la de 2019.
Estas ayudas podrán compensar, como máximo, el 40% de la caída adicional de ingresos en el caso de micropymes y autónomos (hasta 10 empleados), y hasta un 20% para el resto de empresas.
"Debería ser el 40% para todos, ya que estas ayudas se dan a empresas que han perdido más del 30% de la facturación", ha valorado la patronal.
4.000 MILLONES RESTANTES
De los otros 4.000 millones de euros --que sitúa las ayudas en un total de 11.000 millones--, se destinan 3.000 millones a reestructurar deuda y los otros 1.000 a un fondo de recapitalización de empresas medianas afectadas por la crisis.
La patronal ha valorado "negativamente" que se haga una dotación de 3.000 millones de euros reactiva, ante problemas de reestructuración financiera, y considera que deberían inyectarse de forma "directa" para ayudar a las empresas con una fuerte caída de la facturación por la crisis sanitaria.
